Mar. Mar 19th, 2024
Acción G.I. Joe: la venganza

G.I. Joe: la venganza es un panfleto estadounidense que no cumple su objetivo más básico: ser una película de acción entretenida.

G.I.Joe: la venganza

El prólogo de G.I. Joe: la venganza es una declaración de intenciones de las casi dos horas que están por venir. Un equipo de élite estadounidense se encuentra en misión especial en Corea del Norte. No contentos con cumplir su objetivo y soltar un par de frases lapidarias, humillan al enemigo y ríen de él, que para algo son los G.I. Joe. Los buenos. Los mejores.

Curiosamente, los norcoreanos han hecho público hoy, mientras veíamos la película, que han puesto sus armas en posición de ataque apuntando a Estados Unidos. A ver si se va a liar.

G.I. Joe, barras y estrellas

Nadie va a sorprenderse, tratándose esto de cine de acción hollywoodiense, de que el tono fascistoide y proejército americano (y todo lo que eso conlleva) esté bien presente en la película. Pero es que, para rematar la faena, la que tenemos por delante no es ni siquiera propaganda entretenida. Hay un par de secuencias de acción salvables, como esa en la que dos facciones de ninjas se cascan colgados de cables haciendo acrobacias en unas escarpadísimas montañas nevadas pero, en líneas generales, la acción es poco destacable, nada brillante y no sirve para salvar la función.

Los personajes, que son absolutamente fantásticos, rozando el superheroísmo, resultan menos chocantes que los diálogos masticaditos, las tías despampanantes que solo pasan por ahí para lucir cacha o la impunidad con la que actúan los Estados Unidos y lo poco que el resto del mundo importa desde su óptica. Un aburrimiento.

Acción G.I. Joe: la venganza 

The Rock merece algo mejor

Dwayne Johnson es, eso sí, un protagonista perfecto. Parece que se le ha olvidado aquel sobrenombre tan evocador que tenía pero sus músculos siguen pareciendo hechos de gratino y nos alegramos muchísimo, porque (aunque no sea Gina Carano y sus escenas de tortas no estén espectacularmente coreografiadas) reparte estopa como tiene que hacerlo un tipo de su calibre. Bruce Willis pasa por allí como lo hacía en Los Mercenarios 2, saludando, soltando alguna gracieta y ametrallando a algún malo, pero sin cansarse mucho, que no estamos para estos trotes.

El 3D, como viene siendo habitual, no suma ningún tanto a una producción destinada al consumo rápido y casi familiar (la gente se muere, pero tampoco hay mucha sangre) que, aunque envuelto en entretenimiento superfluo, tiene más de panfleto que de divertimento.

Nota de G.I. Joe: la venganza: 3 

Por Víctor Martín-Pozuelo

Al final, me dedico al marketing, al final.

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