Mar. Mar 19th, 2024
Crítica de Horns de Alexander Aja

Solamente un realizador de la talla y carisma de Alexander Aja nos puede sorprender con un filme tan curioso e interesante como “Horns”.

El corazón de Iggy Perrish

En Halloween del 2014 tuvimos la suerte en Estados Unidos de ver este interesante cuento para adultos que es “Horns”, y que por fin se estrena en España. Este nuevo trabajo del realizador francés afincado en la meca del cine supone un cambio de registro sin precedente. Deja atrás el slasher y el gore que le hizo tan famoso para brindarnos una vez más toda la mala uva y su vitriólico sentido del humor. El protagonista de esta parábola es Ig Perrish interpretado por Daniel Radcliffe. Un joven que vive en una pequeña ciudad, y que una buena mañana se despierta y descubre que le crecen un par de cuernos en la cabeza. El motivo es que Dale Williams le acusa del brutal asesinato de Merrin Williams (Juno Temple). A medida que los cuernos le crecen Ig intentará encontrar al verdadero asesino de su novia de toda la vida.

Tras hacer remakes en 3D y mejorar el original de “Piraña” o “Las colinas tienen ojos”, Aja nos propone un extraño thriller sobrenatural que una vez más lo venderán como película de terror, y no lo es. Joe Hill adapta su propio libro a la gran pantalla con la ayuda de Keith Bunin. Se trata de toda una fábula que critica la sociedad estadounidense. El eterno juego de apariencias en el que se mueven los ciudadanos dominados por el poder de la religión. Que piensan una cosa pero hacen otra, que son incapaces de mostrar sus verdaderos sentimientos. Es una historia que parece a primera vista firmada por el gran autor William Hjortsberg. Alexander Aja se ha rodeado de un reparto de lujo, huye completamente de hacer ningún experimento, y por eso cuenta con actores de la talla de Heather Graham, David Morse, Kathleen Quinlan o James Remar. Pero sin duda la estrella, una vez más, es el joven británico Daniel Radcliffe, que está estupendo y marca muy bien el arco del personaje de Iggy. En frente coloca a otro gran actor de su generación Max Minguella. Ambos realizan una gran duelo interpretativo y dosifican muy bien sus fuerzas a lo largo de esa transformación y la deriva que tiene.

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Ofelia muerta

Alexander Aja nos firma su obra más madura hasta la fecha. Su narración es poderosa, carece de tiempos muertos. Su cámara se vuelve muy cínica y nos ofrece momentos muy divertidos, donde descarga toda la ironía que puede sobre la bien intencionada sociedad estadounidense. Sabe sacar todo el rendimiento al decorado natural, a ese folliage tan característico de la Costa Este, que vaticina el final de una etapa, de sus días. Pero hay más, la paleta de colores con la que fotografía este bello cuento es totalmente heredera del prerrafaelista sir John Everett Millais, hasta tal punto que Juno Temple se convierte en toda una Ofelia muerta.

En su contra juega que Aja está atado de pies y manos por una industria que le da de comer y que es incapaz de dar un final fuera de tono a cualquier producto, como hubiera escrito el neoyorquino Hjortsberg. Optan por cerrar esta historia de una manera dulce y bonita. Puede que sea porque en el fondo no deja de ser un cuento para adultos. Aunque sinceramente, al salir de la sala recuerdo que esta historia pedía más mala uva. Con todo y con eso estos “cuernos” merecen ser vistos en pantalla grande para disfrutar de estos personajes poderosos, bien construidos que componen este drama de tintes shakespearianos donde hay un correcto equilibrio entre tragedia y comedia, entre el romance y lo gótico.

Horns (1)

Frases destacadas de “Horns”

  • Iggy Perrish: “Como un ángel que cayó en la Tierra, me convertí en un demonio una vez más”.
  • Iggy Perrish: “Si esto no es el paraíso, no sé qué lo es
  • Iggy Perrish: “Te amaré por el resto de mi vida”.
  • Merrin Williams: “Sólo ámame por el resto de la mía”.

Por Alfredo Manteca

Periodismo UCM. Cinéfilo y cinefago compulsivo. Crecí con Kubrick, Hitchcock y Cronenberg.

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