Mar. Mar 19th, 2024

Dos policías patosos que arrastran traumas desde que se perdieron su baile de graduación en el instituto son devueltos a las aulas siete años después con la misión de desmantelar una red de trapicheo de drogas. Jonah Hill y Channing Tatum en el papel de el gordo listo asocial y el guaperas tontorrón carismático respectivamente se pasean por este remake organizando fiestas para menores de edad, persiguiendo delincuentes montados en limusinas y consumiendo drogas de diseño. A caballo entre la buddy movie, la comedia adolescente y lo policiaco “Infiltrados en clase” tiene un primer tercio casi perfecto que se diluye cuando dejamos atrás los vídeos de Youtube y los desmadres en casa de papá.

Los directores Phil Lord y Chris Miller arrancan bien y a medida que la trama va tomando forma (dentro de lo que cabe) la película empieza a demostrar que el dúo ya sabía lo que estaba haciendo en Lluvia de albóndigas. El uso inteligente del montaje, los gags de dibujos animados y ciertas referencias generacionales comprensibles tanto por adolescentes como por postuniversitarios no dan tregua mientras se celebran los excesos de la juventud y se ríen de los perroflautas de instituto. Sin piedad. Hasta que llega el segundo tercio.

La mezcla de géneros se hace mucho más patente a partir de este punto y acaba por lastrar la comedia, una baza que hasta la casi la mitad de la película se había jugado sin mácula, arrastrando la historia hasta los abismos del drama fraternal, los valores tradicionales de la amistad y el “amigos antes que chicas” que le salen por las orejas a cualquier consumidor de audiovisual comercial americano. Toda la cinta resuena a Factoría Apatow y ese segundo acto centrado en los problemas de adolescentes con los que tienen que lidiar los protagonistas a pesar de estar ya algo talluditos, sumado a las escenas de acción, son como un muro contra el que la locomotora que tiraba de la comedia se empotra.

Mientras que Crank o Piraña 3D se aferraban a su género y lo reventaban a base de no pisar el freno jamás Infiltrados en clase es otra comedia prometedora que se desinfla sin explotar la mitad de ideas que propone. Dejará buen sabor de boca a quien consiga que el drama y la acción no empañen el recuerdo del primer tercio de aventuras y a quien disfrute con una buddy movie casi adolescente.

Frases destacadas de «Infiltrados en clase»:

  • Schmidt: «¿Cuándo me han apuñalado? ¡Es asombroso!«
  • Jenko: «Tiene derecho a… ¡chupármela!«
  • Capitán Dickson: «Son adolescentes, son estúpidos«

Calificación: 6

Por Víctor Martín-Pozuelo

Al final, me dedico al marketing, al final.

Un comentario en ««Infiltrados en clase»»

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