Mar. Mar 19th, 2024

Tom Hooper dirige una visión simplista y superficial de la vida de Lili Elbe, la primera persona conocida en someterse a una cirugía de cambio de sexo.

Cuando uno piensa en «La chica danesa«, una de las primeras ideas que le puede venir a la cabeza es que no deja de ser el típico drama pensado para cazar un puñado de estatuillas de los Oscar. Una historia trágica donde su protagonista atraviesa una difícil etapa personal, normalmente relacionada con motivos de salud y, a ser posible, basada en hechos reales. Esta película reúne todos esos ingredientes y aunque no carece de virtudes, el resultado final deja un regusto inevitablemente agridulce.

Einar (Eddie Redmayne) y Gerda (Alicia Vikander) fueron un matrimonio dedicado por entero a la pintura. La vida de este matrimonio dio un giro cuando Einar sustituyó a la modelo femenina que su mujer, Gerda, tenía que pintar. Cuando los retratos resultan ser un éxito, ella anima a su marido a adoptar una apariencia femenina. Lo que comenzó como un juego llevó a Einar a una metamorfosis que puso en riesgo el amor de su esposa…

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Una pareja olvidable

El principal problema del que adolece «La chica danesa» es que resulta algo difícil empatizar con el personaje de Einar/Lili. Durante gran parte del film toda esa transformación parece más un capricho que una verdadera necesidad, lo cual juega bastante en contra del personaje. Es por ello que el verdadero arco evolutivo lo encontramos en Gerda, su esposa. Gerda no puede evitar sentirse responsable del cambio por el que está pasando su marido, el cual, al estar reconocido por la medicina de la época como una enfermedad, se somete a una serie de terapias de dudosa efectividad.

La entrega de ambos protagonistas en sus respectivos papeles equilibra bastante el producto final y aunque Redmayne tenga el personaje más llamativo y más difícil, Alicia Vikander sale mucho mejor parada al interpretar a un personaje con el que el espectador medio puede estar más familiarizado y que por lo tanto resulta más fácil de entender. La película queda realmente coja a la hora de equilibrar la balanza entre lo que resulta importante y lo que no, dejando una sensación al final de que habrían sido de agradecer más minutos protagonizados por Einar/Lili para comprender más esa confusión de identidades y su dura transición.

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Un director sin personalidad

Tom Hooper aquí se vuelve a revelar como un director competente sin más. Si «El discurso del rey» en su momento ya padecía de ciertos problemas de ritmo, «La chica danesa» no se queda atrás. Aunque no podemos negar de que la película resulta especialmente elegante a nivel formal, con una fotografía y un diseño de producción impecables, carece de la emotividad necesaria que una historia tan dura podría conseguir en manos de un director algo más visceral. Aunque afortunadamente Hooper ha decidido abandonar algunas de sus costumbres estéticas, como mantener a sus protagonistas pegados al fondo cuando están en una situación incómoda durante secuencias casi enteras, se aprecia mucho más autocontrol con respecto a esos recursos y se emplean cuando realmente pueden aportar algo a la narración.

Poco más se puede añadir de una película que es, en muchos aspectos, decepcionante. «La chica danesa» no pasará más allá de la anécdota de ver a Eddie Redmayne travestido, por lo demás es una oportunidad totalmente desaprovechada que sólo sirve para el lucimiento de su pareja protagonista.

 Frases destacadas de «La chica danesa»:

  • Hans Axgil: I’ve only liked a handful of people in my life, and you’ve been two of them.
  • Gerda Wegener: We went for coffee, and after… I kissed him. And it was the strangest thing. It was like kissing myself.
  • Einar Wegener: I think Lily’s thoughts, I dream her dreams. She was always there.
  • Einar Wegener: I love you, because you are the only person who made sense of me. And made me, possible.
  • Hans Axgil: We were fooling in the kitchen. Einar was wearing his grandmother’s apron… We were just little boys, you know, playing around? Anyway, Einar just looked so pretty and… I had to kiss him! So, yes, I kissed Einar.

Trailer de «La chica danesa»:

Por Imanol De Frutos

Graduado en ESCAC y montador de profesión. Siempre hambriento de ficción.

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