Mar. Mar 19th, 2024

La pareja de directores Javier Ambrossi y Javier Calvo adaptan a la gran pantalla su exitosa obra de teatro musical.

A los actores Javier Ambrossi y Javier Calvo el renombre les sobrevino como creadores, con la obra teatral La llamada, la historia de una joven, María, a la que Dios se le manifiesta en un campamento de monjas a través de canciones. En cartel desde 2013, ha saltado las fronteras, interpretándose también en México. Pero lejos de ser un fenómeno aislado, Ambrossi y Calvo repitieron éxito con la premiada webserie Paquita Salas (2016). Toca esperar ahora a ver si su primer trabajo en cine tras las cámaras, adaptación homónima de la obra mencionada al principio, mantiene esta estela. Potencial no le falta. En primer lugar, porque la manera en la que los realizadores se aclimatan del terreno escénico al cinematográfico es impecable, llevando a cabo una producción muy cuidada a prácticamente todos los niveles, en la que además participan las actrices del casting original, lideradas por Macarena García (hermana de Ambrossi). En el relato se intercalan canciones de Whitney Houston y Presuntos Implicados junto a las originales de Alberto Jiménez (líder del grupo Miss Cafeína), al que en la película le sustituye Leiva, componiendo la banda sonora instrumental y el tema principal, que él mismo interpreta, y que es carne de nominación al Goya; todo ello da como resultado un conjunto que sabe aprovechar sus atractivos recursos.

Fe, amor y éxtasis

La casualidad ha querido que “La llamada” se estrene en cines al mismo tiempo que otra película española de apariencia tan diferente como “Converso”, el documental familiar de David Arratibel; sin embargo, ambas nos presentan el encuentro con la fe de María (incluso las principales aludidas comparten un nombre tan significativo) de manera inesperada y la canalización de ese amor recíproco a través de la música. En el caso que nos ocupa, la historia de la protagonista con Dios (encarnado por Richard Collins-Moore) está contada además en clave romántica: la ensoñación y el aturdimiento de los primeros momentos o la decepción cuando el objeto amoroso nos rechaza nos llevan a un final con una representación del éxtasis a través de las canciones y los bailes en el que queda de manifiesto que, más que a los musicales clásicos, la película recuerda a la revisión edulcorada y algo inocente que de ellos hacía (con mucha eficacia) la serie Glee; aunque sí que hay secuencias, como la apertura con «I will always love you», que remite directamente al número «Beauty School Dropout» de “Grease” (1978).

Gran parte del buen funcionamiento de la película se debe a la labor de sus actrices. Las ganadoras del Goya Macarena García y Anna Castillo son María y Susana, dos amigas chonis que solo se preocupan por su grupo de música electrolatina, hasta que la revelación de María provocará que su relación cambie drásticamente. Curiosamente, el personaje de María, en comparación con la visceralidad del de Susana (con una interpretación muy potente de Castillo), queda algo deslucido, siendo su historia principal así a veces eclipsada por las secundarias, sobre todo por la de la hermana Milagros (magnífica Belén Cuesta), una monja que sigue el camino inverso de la protagonista, y entra en crisis de fe. Tanto Cuesta como Gracia Olayo, que da vida a la hermana Bernarda, tienen un talento natural para la comedia, consiguiendo juntas, como en el número que comparten, «Estoy alegre», los momentos más álgidos del filme.

Como reflejo de una generación que busca por distintos medios encontrarse a sí misma, “La llamada” no se toma en serio y por tanto no conviene que el público tampoco lo haga, sino que se deje llevar por este sano divertimento, totalmente autoconsciente de la absurdez de muchos de sus planteamientos.

Frases destacadas

  • Bernarda: “Os creéis muy guays, pero aquí la guay soy yo”
  • María: “Cambiar no está mal, ¿no?”
  • María: “Veo a Dios”
  • Milagros: “Esto es más grande que lo de Fátima y lo de Lourdes”
  • Susana: “Qué fuerte lo tuyo que te mola Dios»

Tráiler de “La llamada”

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