En un descampado, junto a un cultivo de maíz, un hombre espera pacientemente mientras observa cómo avanza el segundero de su añejo reloj de mano. Frente a él, una capa de plástico sujetada por unas piedras sobre el suelo, ondea plácidamente con la brisa. Llegado un momento, el hombre guarda su reloj, toma un voluminoso rifle y apunta al vacío frente a él. Como llegada de la nada, una persona arrodillada, con las manos atadas a la espalda y la cabeza cubierta se materializa en un instante sobre el plástico, y antes de que tengamos tiempo de sorprendernos, el hombre dispara un cañonazo contra el pecho de la recién aparecida víctima. Así empieza “Looper”, la última película de Rian Johnson (el director de “Brick”), y de lo mejorcito que he visto en cine en los últimos tiempos. Una magnifica película de ciencia ficción y viajes en el tiempo con buen guión, buenos actores y buena ambientación que devuelve un poco la esperanza en la creatividad y talento de los cineastas.
La escena con la que se abre la película es simplemente una rutinaria mañana de trabajo para Joe (Joseph Gordon-Levitt), un mercenario de la decadencia post-futurista de 2042. Joe pertenece a un club un tanto particular: es un looper, y como tal se dedica a asesinar y a hacer desaparecer cadáveres que son enviados desde el futuro. La idea es redonda. Los viajes en el tiempo no se han inventado aún en la época de Joe, aún faltan tres décadas para ello. Al poco de que tenga lugar este avance, será prohibido inmediatamente por las autoridades para prevenir cualquier tipo de alteraciones tendenciosas y paradojas varias. Sin embargo, una poderosa organización criminal consigue conservar oculta una máquina del tiempo con el propósito de deshacerse de cuerpos con gran facilidad. ¿Qué mejor forma puede haber para librarse de las pruebas incriminatorias? Los asesinados desaparecen de la faz de la tierra y llegan a un momento en el que no se los busca. Limpio y eficaz. Los loopers son debidamente compensados por este trabajo sucio: se les paga con lingotes de plata que llevan las propias víctimas atados al cuerpo. El salario es más que generoso y estos profesionales del crimen pueden permitirse una vida de derroche y placer desenfrenado, clubes nocturnos, drogas, chicas y demás lujos que la inmensa mayoría de la sociedad, tremendamente pobre, no puede permitirse. Este epicureísmo es hasta cierto punto muy comprensible, ya que el contrato de un looper incluye una cláusula importante: tarde o temprano, sin saber exactamente cuándo pero con la certeza de que ocurrirá, la mafia se plantará en tu casa, te pondrá un saco en la cabeza y te mandará al pasado para que tú mismo acabes con tu vida, para cerrar tu bucle (loop en inglés) y evitar reducir posibles complicaciones derivadas del mal conocido viaje temporal.
Creo que es mejor dejar en este punto la sinopsis y que el espectador se deje sorprender. Diría incluso que los trailers son desaconsejables, porque la trama tiene varios puntos de inflexión a lo largo del metraje en los que se añaden nuevos e interesantes elementos (algunos esperables y otros no tanto) que van a complicarle mucho la existencia a Joe. El guión, como decía, me ha gustado mucho, me ha dejado “pegado a la butaca” como hacía tiempo que no lo conseguía ninguna película. Muy bien equilibrada la acción y el suspense, buen ritmo y muy buen uso del recurso de los viajes temporales, que le da empaque a la trama pero no se complica demasiado. Corrieron rumores por la red de que Shane Carruth (director de Primer) estaba involucrado en el guión, pero aunque en los rótulos de crédito aparezca en los agradecimientos, no parece que su labor haya ido más allá de asesor. No es, ni mucho menos, una película compleja o difícil de seguir. De entre las distintas posibilidades con las que se puede tratar el asunto del viaje temporal, veremos el escenario de los universos paralelos (una acción en el pasado genera un universo alternativo nuevo) pero con cierta resiliencia a que los acontecimientos se mantengan estables. El propio tema de las paradojas se menciona con ironía durante la película, insinuando que es mejor no comerse mucho la cabeza, porque te podrías tirar una eternidad haciendo diagramas hasta volverte loco.
El futuro que se nos plantea no parece muy adecuado para vivir: gente sin hogar en grandes comunidades en las calles y parques, defendiendo con armas lo poco que tienen, el crimen organizado se vuelve poderoso y establece la ley en los barrios mientras que los privilegiados que tienen dinero viven en “universos paralelos” de lujo y ostentación. La hegemonía china se hace una realidad y Occidente se hunde en su propia decadencia.
Los actores están en líneas generales muy bien, y no sólo los protagonistas, sino también un buen elenco de secundarios. Joseph Gordon-Levitt aguanta razonablemente el peso de la trama y se desenvuelve en las escenas de acción, en las de drama, en las de sexo y en todo lo que haga falta, aunque quizá no es el papel más destacable. Bruce Willis, por su parte, hace de contrapunto perfecto (inevitable no recordar “Doce monos”) como viajero del tiempo sabio y con recursos, con algo por lo que luchar. También resulta destacable el papel del jovencísimo Pierce Gagnon, con una interpretación más que notable para un niño, que llega a dar auténtico pavor. En cuanto a los secundarios a los que hacía mención, creo que hay que alabar a Jeff Daniels haciendo de Abe, capo paternalista, sabio e implacable, y a Noah Segan como Kid Blue, matón de segunda que sin embargo se va creciendo a lo largo de la trama.
Esta película viene a confirmar mi opinión sobre el cine (y la literatura) de ciencia-ficción. Difícilmente estaremos ante una obra buena sólo porque tenga un planteamiento original o novedoso. Las grandes obras de este género triunfan porque, al margen de su sofisticación y de lo que nos hagan soñar con mundos lejanos o tecnologías inaccesibles, finalmente hablan de las grandes cuestiones humanas. Lo importante de looper no es el viaje temporal, sino la reflexión sobre temas interesantes como qué nos hace ser quien somos, el libre albedrío, las oportunidades perdidas y la búsqueda de la redención. Os la recomiendo y espero que la disfrutéis.
Frases destacadas:
Abe: Esta mierda del viaje en el tiempo te fríe el cerebro como si fuera un huevo.
Suzie: La plata tiene sus ataduras.
Joe: 30 años de aquí en adelante será ayer.
Calificación: 9
Muchas ganas de Looper.
Me parece muy interesante el detalle de la hegemonía china, un recurso que está en los periódicos de hoy, listo para que cualquier guionista o director lo coja y convierta en elemento angular de una historia, pero que parece no haber calado todavía. ¡Lo más increíble de Prometheus era que solo había un asiático en el equipo!
Por otro lado, respiro tranquilo tras saber que ninguna cabecita pensante detrás de Primer hace doblete aquí. Primer es un ejercicio transmedia muy chulo donde, para entenderlo todo, tienes que recurrir a elementos fuera de la hora y media de película… pero tampoco hace falta que se conviertan en tendencia!
Ganitas, ganitas.
¡Nepotismo!
Os encantrará
Me ha encantado. ¿Que importantes somos las madres? jejejeje. Los actores impecables, excepto, Bruce W., que como siempre parece que se rie de todo en todo momento. Quitando ese pequeño detalle, muy buena pelicula
Muy buena, un soplo de aire fresco en el manido tema de viajes en el tiempo y futuros deprimentes. Aun así, será por el nivel de hype que llevaba, me fallaron algunas cosas: el comienzo es tan BRUTAL, el ritmo trepidante, la economía narrativa tan bien manejada, que el segundo acto supone un bajón tremendo, cambia casi hasta el tipo de película. Luego esto sirve para conseguir un desarrollo de personajes y un acercamiento del final muy bueno, pero en cambio se pasan muy rápido otros tramos de la historia que hubiesen requerido de mayor profundidad para que el final fuese todo lo coherente que debía. La historia de Joe Viejo pre-salto hubiese ganado muchísimo con más chicha, me hubiese sido más fácil tragarme el desenlace.
Pero en cualquier caso, seguro que al verla por segunda vez la disfruto más aún, porque sólo en la riqueza de detalles y en la forma de rodar de este pedazo de director uno ya se puede tirar un buen rato de gozo.
Lo mejor de largo, la actuación del niño. Pese a que toda su subtrama me sonó mucho a cierto referente que no menciono para no espoilear (esto me restó sorpresa, también lo lamenté), gracias a la labor del chiquillo, pues oye, los pelos como escarpias.
Yo también tengo muchas ganas de verla de nuevo, coincido en que tiene un comienzo brutal, encima las referencias a Brian de Palma (La Furia) y Cronenberg (Scanners) geniales y brillantes. Me encanta como va girando la trama, y hace que comulgue con las escenas más Willis de tiros a diestro y siniestro.
Vale la vere una segunda vez. Esta semana han estado en los comercios dando pases para ir al cine, con estos pases en los Kinepolis la entrada vale 2 E. Así que voy aprovechar y volvere a verla porque me gusto mucho. La estética sobre todo de los personajes. Mas del momento actual (donde empieza la peli) que del futuro
OJO QUE VOY CON UNA IDEA
En otra línea temporal, el prota no se dispara en el corazón sino en la mano. A esto lo vamos a llamar «Hacer un Frequency».
Al principio de la película vemos como un pobre secundario es mutilado fuera de plano, reflejándose la pérdida de miembros en su yo adulto. ¿Por qué no explotar un poco más esa idea tan estupenda? ¿Por qué dejarla en aquella secuencia y en grabarse mensajes en el brazo, si daba para tanto?
Como digo, el prota joven se dispara en la mano derecha y se la vuela, cosa que se refleja en el prota viejo, que pierde la mano y con ella se le cae la pistola al suelo. Unos segundos providenciales, entre la sorpresa de Bruce Willis y recoger el arma con la otra mano, para que la madre del crío (tras dudar una fracción de segundo) se lance a por el calvo. Ya habíamos visto que no le tiene miedo a nada, sabe manejar una escopeta y un hacha, así que darse unas tollinas con un abuelo por su crío es pan comido para ella.
Así que se enzarzan y se dan de galletas, y cuando parece que todo está perdido, porque es lo suyo, aparece el prota joven y le echa una mano. Y cierra su loop.
Lo siento: aquella noche no me apetecía llorar en el cine y el final no me convenció.
Me alegra saber que no fui el único que se dio cuenta que ESO tendría MUCHA más lógica que el final de la película que lo único que quiere es mostrar un personaje Mártir, cumpliendo una vez más los mayores estereotipos vigentes en Hollywood.
A tope.
Toda, y digo toda, la buena ciencia ficción es un reflexión explícita sobre la naturaleza humana, su historia y sus sociedades. Esta película entra dentro de esto de lleno. La vi ayer y me gustó mucho. Especialmente me gusto el giro que pega en la segunda parte, cuando aparece la familia y ESE niño. ESE niño es glorioso. El puto Son Gohan en carne y hueso y sin tanta ñoñería. Por cierto, que Bruce Willis parece sacado directamente de Pulp Fiction (¿su vestimenta no es exactamente la misma? Mirad esto: http://spiegelman.tumblr.com/post/33017569875/spoiler-alert-is-the-joke-about-looper-that#_=_
Me alegro que te haya gustado, coincido contigo de lleno sobre el concepto de la ciencia ficción. Hoy vamos a criticar una película que es un claro ejemplo. EL niño brutal!! Y qué curiosidad la vestimenta de Willis. Ninguno en la redacción hemos caido, y nos parece curioso.
Yo también coincido en ese concepto de la Ciencia Ficción, pero para mi Looper no ahonda realmente en nada. Por lo menos no me dio la impresión.
La vi superficial y estereotipada, sobretodo con todo el potencial que tenía.