El cerebro de David Cronenberg y las manos de Bruce Wagner cavilan por las entrañas podridas de Los Ángeles para dar a luz al turbio «Map to the Stars».
Lo que pasa en Hollywood se queda en Hollywood. La premisa de Las Vegas podría estar inspirada en las colinas de Beverly Hills y quienes pueblan sus moradas, seres de otra galaxia de diferente estructura normativa, sin mucha catadura moral y que no salen de casa sin la tarjeta de contacto de la última clínica de rehabilitación de moda.
Los trapos sucios se lavan en Hollywood
«Map to the stars» es una resaca esquizoide. El cineasta canadiense navega por el mismo rumbo que «Cosmópolis» pero dejando los delirios de Nueva York por las cloacas de Los Ángeles. Cronenberg, fiel a su estilo de cínico pasado de rosca, retrata la meca de las estrellas en un alarde de esperpento de Valle-Inclán, donde los personajes que viven al límite, son empujados más todavía a situaciones extremas hasta llevarlas al ridículo. La narrativa hardcore provoca carcajadas y risa nerviosa constantemente, quizá por lo surrealistas que pueden parecernos las escenas o a lo mejor por un exceso de realismo difícil de digerir. Lo cierto es que ahí donde se adentra el drama, lo que te encuentras al rascar un poco es una comedia muy pero que muy negra.
Los arquetipos que reinan este entramado vicioso son bien prototípicos de los trapos sucios hollywoodienses, a los que Cronenberg ataca sin compasión: Actores/actrices viejas glorias que reniegan al paso del tiempo en contra de nuevas promesas del cine despiadados con todo cuanto les rodea y con unos padres que les conciben como máquinas de hacer dinero. Un hervidero para la cienciología y demás comecocos sectarios, familias disfuncionales, traumas por allí y drogas, adicción a los fármacos, endogamia, abusos infantiles y sexo enajenado por allá. Y fuego, mucho, mucho fuego. En conclusión, una espiral de autodestrucción que avanza sin frenos.
Cronenberg y su peculiar visión enfermiza
Las diferentes subtramas se reparten de forma irregular y el comienzo de la película arranca con dificultad, pero en seguida coge fuelle y a pesar de las elipsis en el guion de Wagner, las historias armonizan todo lo bien que pueden gracias a unos diálogos delirantes, cargados de fuerza por las grandísimas interpretaciones. Todos los personajes oscilan entre la ‘ascopena‘ o las ganas de apadrinarlos de lo vulnerables que parecen. Julianne Moore, tan brillante como siempre, ya ha ganado el premio a mejor actriz en Cannes y Sitges por este papel. En «Map to the stars» también nos encontramos a John Cusack, Olivia Williams y un reparto más joven encabezado por Robert Pattinson, Evan Bird y Mia Wasikowska, que el papel de desequilibrada le queda inquietantemente bien.
Rebuscando entre todos los grandes placeres que deja esta película, yo me quedo con un fragmento de Paul Eluard que se repite varias veces durante el metraje y cobra más sentido en su epílogo: «En toda carne entregada, en la frente de mis amigos, en cada mano que se tiende, yo escribo tu nombre. En la ausencia sin deseos, en la soledad desnuda, en los peldaños de la muerte, yo escribo tu nombre. Y en el poder de una palabra, empiezo de nuevo mi vida. He nacido para conocerte. Para nombrarte. LIBERTAD».
Frases destacadas de «Map to the stars»
- Agatha: «Conocí a Carrie Fisher por Twitter»
- Jerome: «Pensé en hacerme de la cienciología para relanzar mi carrera»
- Havana: «No sirvo para bollera»
- Dr. Stafford: «El fuego ha unido a dos mujeres»
- Havana: «Nosotras somos fuego y él es agua»
- Benjie: «Para ser una desfigurada esquizofrénica te las apañas bastante bien»
Me cuesta tanto reconocer al gran Cronemberg en este insustancial film. Un desperdicio. No vi su anterior pelicula, pero ahora me alegro de no haberlo hecho.
Yo he visto «Cosmopolis» Felix y me pareció un filme muy crítico con todo el ambiente económico.Lo grande de Cronenberg es que sigue hablando de los mismos temas pero desde otras ópticas, la verdad es que nadie podrá decirle que se repite, y deja tranauilas sus grandes obras. Y mira que Universal le está detrás de hacer versiones de clásicos suyos o segundas partes.
Reconozco que al salir del cine mi primera sensación fue un WTF? gigante. Pero una vez reposada fui reflexionando sobre los matices y me terminó por parecer fascinante. Creo que Cronenberg va de tío raruno destroyer por la vida pero luego todo es mucho más sencillo de lo que parece. ¡Gracias por tu opinión, Félix!