Mar. Mar 19th, 2024

El destino le brinda al invidente más turbio del cine una nueva oportunidad de ser feliz, pero unos intrusos le obligarán a tomar soluciones desesperadas.

Un villano muy humano

Estamos ante la ópera prima de Rodo Sayagues, que para los que no le conozcan, es la mano derecha del realizador y guionista uruguayo Fede Álvarez. Ambos revitalizaron Posesión infernal de Sam Raimi y sorprendieron a todos con la estupenda No respires. Es más, siguen ahondando en clásicos del género de terror hasta el punto de que acaban de revisitar la fábrica de carne de “Texas Chainsaw Massacre” , que está pendiente de estreno.

Ambos han elaborado el guion de “No respires 2”. Una vez más, nos plantean una heist movie, sólo que esta vez el botín tiene un valor incalculable. La acción se sitúa ocho años después del atraco a la casa del invidente Norman Nordstrom. Ahora vive con una niña de 11 años llamada Phoenix, y se convierte en la anhelada hija que siempre quiso tener. Como no puede ser de otra forma, Norman le esconde su oscuro pasado y es sobreprotector con ella. Porque no quiere volver a perder otra hija, de ahí que le enseñe todo tipo de técnicas de supervivencia. Su rutina se verá interrumpida cuando un grupo de traficantes de órganos decida intentar entrar en la propiedad de Norman, esta vez. para intentar hacerse con el codiciado y joven corazón de Phoenix.

El principal problema de este largometraje es su argumento y estructura. Los giros de guion son desmadrados e inverosímiles. Sayagues ha vuelto a contar con Stephen Lang para dar vida al terrorífico y demente invidente. Ni que decir tiene que su actuación es uno de los pilares básicos del filme, una vez más, defiende con uñas y dientes su personaje, y nos realiza un estupendo trabajo, digno de recordar.

Ahora vienen los peros. En la primera entrega teníamos a unos astutos ladrones enfrentándose a este aterrador ciego. En esta secuela, sus creadores han decidido blanquear su figura, para que empaticemos con él, olvidando que estamos ante un largometraje de terror, no un drama doméstico. Las grandes productoras, en los últimos años, en un intento de prologar la vida de los grandes villanos han decidido humanizarlos. Sirva de ejemplo los irrisorios vampiros de “Crepúsculo”. En el caso que nos ocupa, Norman es un pitbull que no se puede domesticar, es una fiera sin ataduras, sin fantasías de moralidad. Hasta el mismo intenta reivindicar sus orígenes en uno de sus diálogos cuando dice: “No soy más que un monstruo”, y así nos lo planteaban en el filme original.

Un estupendo reparto

En esta secuela ambos guionistas luchan contra viento y marea durante 1h y 38 minutos de metraje tratando de humanizar su figura. En hacer de él un antivillano. Eso es lo más descabellado. Eso significa que tienes que enfrentar a Norman a unos villanos más terribles. Es ahí donde surgen más peros porque no lo consiguen, por mucho que le oxigenen el pelo al actor Adam Young y le hagan un corte de pelo asimétrico para dar más señas de maldad. Es más, le podrían haber puesto un par de tatuajes o tres. Fiona O’Shaughnessy, a la que todos recordaréis por ser Jessica Hyde en la serie Utopía, aquí vuelve a bordar su excelente trabajo, pero volvemos a caer en problemas de verosimilitud en el plano argumental. Al igual que pasa al actor Brendan Sexton III que da vida a Raylan, el cabecilla de la banda de traficantes de órganos.

Al final estamos ante un filme totalmente previsible, donde cada cosa que aprende la joven Phoenix sabes que le acabará salvando la vida. La película se acaba convirtiendo en un artificio de difícil digestión. Carece de tensión visual.  La importancia del sonido, que jugaba un papel trascendente en el original, aquí desaparece. Además, no acierta al elegir un punto de vista desde donde narrar la acción. Siguiendo con los peros que le podemos poner a la cinta, encontramos que los dilemas morales que nos planteaba su predecesora aquí resultan de lo más pueril. Y finalmente, el novel director arranca el filme de la misma manera que Fede Álvarez realizó la primera parte. Queremos entender que como homenaje a su amigo y compañero de fatigas, pero en la primera vuelta de tuerca de esta paternidad por accidente todo se le va de las manos.

Frases destacadas:

  • Norman Nordstrom: “Dios es justo”
  • Hernández: “Eres un hombre malo”
  • Norman Nordstrom: “No tienes ni idea de lo que es estar solo”
  • Raylan: “Basta ya de juegos estúpidos”

Tráiler oficial de “No respires 2”

 

Por Alfredo Manteca

Periodismo UCM. Cinéfilo y cinefago compulsivo. Crecí con Kubrick, Hitchcock y Cronenberg.

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