Mar. Mar 19th, 2024

Gerard Butler vuelve a encarnar al guardaespaldas Mike Benning en esta inesperada aunque disfrutable secuela de «Objetivo: La Casa Blanca».

Hace tres años se produjo una de esas incómodas coincidencias que de vez en cuando se generan en el cine hollywoodiense. Se estrenaban, con pocos meses de diferencia, dos películas con un argumento y un público objetivo similar: «Objetivo: La Casa Blanca» (Antoine Fuqua, 2013) y «Asalto al Poder» (Roland Emmerich, 2013). Pero como dijo una vez Christopher Lambert: «Sólo puede quedar uno». Concretamente el duelo lo ganó la cinta de Fuqua, pensada como un filme de acción honesto y que satisfizo las necesidades del espectador acostumbrado al cine de acción ochentero y con cierto espíritu de serie B. En resumidas cuentas, «Objetivo: La Casa Blanca» resultaba un producto digno de la mejor época de la ya desaparecida Cannon Films, todo esto dicho en el mejor de los sentidos.

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Londres bajo asedio

Debido a ese éxito, tres años después llega a nuestras pantallas «Objetivo: Londres«, una secuela que procura seguir la tónica habitual de «más grande y más caro» que impera en los productos de estas características. Tras el fallecimiento del primer ministro británico en extrañas circunstancias, todos los líderes mundiales se reúnen para su funeral. Pero lo que parece ser el evento más seguro y vigilado del planeta resulta ser la oportunidad para acabar con los mandatarios y sembrar el caos en todo el mundo. Solo el presidente de los Estados Unidos con su equipo del Servicio Secreto, el portavoz Trumbull (Morgan Freeman) y el agente Mike Benning (Gerard Butler) parecen ser los únicos capaces de evitar los terribles planes.

Babak Najafi es el encargado de recoger el testigo de Fuqua y lo cierto es que, a diferencia de lo que ya viene siendo habitual en el género durante la última década, nos encontramos ante un tratamiento de la acción bastante más estático y académico de lo que cabría esperar en un director «de encargo» y poco experimentado como Najafi. Parece que los intentos de imitar sin éxito el estilo de Paul Greengrass están empezando a dejarse de lado por lo que, a pesar de lo predecible y tópico de su guión, «Objetivo: Londres» cuenta con una serie de secuencias de acción bastante destacables. Un claro ejemplo podría ser el enfrentamiento de Mike Benning, nuestro protagonista, contra una unidad terrorista en un piso franco a oscuras, aprovechando el sigilo y el efecto sorpresa para salir airoso; o un elaborado e inesperado plano secuencia que cubre un tiroteo entre terroristas y militares británicos en un callejón. Son estas espectaculares escenas y el tono casi auto-paródico de la cinta otorgado por contadas one-liners los elementos que consiguen que la película resulte un pasatiempo sin pretensiones en vez de una soporífera y plana secuela.

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Las mecánicas de siempre

La película pasa desde el minuto uno por lugares ya clásicos (y anodinos) en el cine de acción. Es por ello que los momentos más duros para el espectador son aquellos que se desarrollan los primeros veinte minutos, en los que debemos pasar el clásico trámite de conocer el contexto familiar de nuestro protagonista y los secundarios que le rodean. Afortunadamente, una vez pasados esos minutos el conflicto, literalmente, estalla y «Objetivo: Londres» consigue dar lo que promete en los aspectos esperados, sobre todo para aquellos que no esperen una gran aportación al género y simplemente quieran contemplar una catarsis donde el plomo, las explosiones y los efectos visuales de saldo están a la orden del día.

Seguramente el estudio esté considerando producir una tercera parte si esta secuela funciona en taquilla, pero creo que sería conveniente intentar darle un giro de tuerca a su planteamiento, porque si ya cuesta creer que un presidente pueda sobrevivir a dos ataques terroristas de tal envergadura, no me quiero imaginar un tercero. Habrá que esperar a ver si los números acompañan esta vez.

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Frases destacadas de «Objetivo: Londres»:

  • VP Trumbull: To those who threaten our freedom: America will rise up. And make no mistake; we will find you, and we will destroy you.
  • Aamir Barkawi: London is just the first stop. Just imagine every major city, descending into chaos. Your president dies tonight.
  • Benjamin Asher: I will not be executed as propaganda.
  • Mike Banning: People like you have been trying to kill us for a long time. But a hundred years from now, we’ll still fucking be here.

Trailer de «Objetivo: Londres»:

Por Imanol De Frutos

Graduado en ESCAC y montador de profesión. Siempre hambriento de ficción.

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