Mar. Mar 19th, 2024
Reparto: Ernesto Alterio, Juana Acosta, Eduard Fernández, Dafne Fernández, Eduardo Noriega, Belén Rueda y Pepón Nieto

Álex de la Iglesia vuelve por segunda vez en este año a los cines con el remake de una comedia italiana del 2016.

A principios de año, Álex de la Iglesia presentaba en la Berlinale «El bar», y con motivo de su estreno en salas comerciales apuntábamos la época tan prolífica que está viviendo el director. Esto queda plenamente en evidencia con la llegada ahora a los cines de su siguiente trabajo, «Perfectos desconocidos», que se trata de una adaptación de la película italiana «Perfetti sconosciuti» (2016) de Paolo Genovese, la cual en solo un año ya ha conseguido esta versión española, y otra programada para 2018, en este caso francesa, titulada «Le jeu» y dirigida por Fred Cavayé. Y aunque esta celeridad podía indicar que nos íbamos a encontrar con una obra menor del cineasta bilbaíno, el resultado, bastante satisfactorio a pesar de algo impersonal, nos permite predecir por su estilo y temática un más que asegurado éxito de público.

Secretos y mentiras

En plena era del dominio de la tecnología, el móvil puede ser una herramienta de gran ayuda, pero también la causa de multitud de nuevos problemas generados por la falta de privacidad. Eso lo saben bien los protagonistas de «Perfectos desconocidos», un grupo de amigos que se jacta de no tener nada que ocultarse entre ellos o a sus parejas. Por eso, durante una cena, deciden a modo de juego poner sus teléfonos a disposición de todos, para que cualquier mensaje o llamada que llegue sea leído y escuchado en conjunto. ¿Qué problema puede haber? Pese a algunos momentos de sentimientos desatados, y el influjo fantástico que un excepcional eclipse ejerce en la historia, nos encontramos ante una de las versiones más contenidas de De la Iglesia. Un vehículo teatral para el lucimiento de sus actores, en el que disfrutaremos de la vertiente más cómica del gran Eduard Fernández, del cambio de registro habitual de madre sufridora de Belén Rueda, o de Ernesto Alterio y Juana Acosta, que pasan de pareja en la vida real a matrimonio en grave crisis. El realizador vuelve a dejar clara su capacidad para manejarse con los repartos corales, especialmente en un trabajo tan dialéctico, que incluso satura un poco, también por lo forzado de algunas revelaciones y por la música de Víctor Reyes, eficaz pero algo sobreutilizada.

El nuevo trabajo de Alex de la Iglesia

Sin embargo, los problemas de la película vienen en su mayoría de una actitud ambigüa en torno al uso descuidado de los mensajes, y a algún elemento cuestionable con respecto al tratamiento de las mujeres (algo que ya se le achacó a «Las brujas de Zugarramurdi» -2013-), a sus infidelidades y su actitud frente al engaño de sus maridos. Aunque tampoco ellos salen mucho mejor parados. Como es habitual, De la Iglesia toma algunas de las pasiones humanas más bajas y las explota al máximo, entendiéndose la mentira y la ocultación como actitudes puramente naturales, hasta que son descubiertas y no hay punto de retorno. ¿O sí? El tono positivo de «Perfectos desconocidos» y la falta de aprendizaje de sus protagonistas hacen que sea difícil verla como una crítica, pasando finalmente la solución no por intentar hacer las cosas mejor, o al menos de una manera diferente, sino por la ignorancia y por tener más cuidado con cómo utilizamos nuestros dispositivos.

Frases destacadas:

  • Eva: Peor que el aburrimiento no hay nada, te lo aseguro.
  • Eva: Ya no hay marcha atrás.
  • Antonio: Pues empezamos bien.
  • Eduardo: Yo paso de contar las cosas a un psicólogo, para eso están los amigos.
  • Ana: A lo mejor es que no te he conocido nunca.

Trailer de «Perfectos desconocidos»

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