Dwayne Johnson protagoniza una espectacular cinta de acción que hará las delicias de los apasionados del cine palomitero y la destrucción gratuita.
Ha quedado claro, desde hace ya algunos años, que las películas cuyo principal reclamo para el público consiste en ver a uno o varios seres de dimensiones desproporcionadas sembrando el terror en una gran ciudad han vuelto para quedarse. Las llamadas monster movies (o kaiju-eiga para los puristas) han vuelto para quedarse y, concretamente «Proyecto Rampage» entra en escena para quitarnos el mal sabor de boca que pudo suponer para muchos de nosotros la malograda «Pacific Rim: Insurrección» (Steven S. DeKnight, 2018).
El primatólogo Davis Okoye (Dwayne Johnson), tiene un sólido vínculo con George, el extraordinariamente inteligente gorila de espalda plateada al que ha estado cuidando desde que nació. Pero cuando un experimento genético sale mal, este apacible simio se convierte en una enorme y embravecida criatura. Para empeorar más las cosas, pronto se descubre que existen otros animales con la misma alteración. Cuando estos depredadores alfa recién creados arrasan Norteamérica destruyendo todo lo que se interpone en su camino, Okoye se une a la Dra. Caldwell (Naomie Harris) una ingeniera genética sin prestigio para conseguir un antídoto y se abre paso en un cambiante campo de batalla, no solo para frenar una catástrofe mundial sino para salvar a la aterradora criatura que una vez fue su amigo.
Dwayne Johnson, primatólogo y héroe de acción
Se podría decir, sin temor a que suene exagerado, que las películas protagonizadas por Dwayne Johnson se han convertido en un género en sí mismo; no sólo porque sus papeles parezcan hechos a medida para él, en los que suele interpretar a un hombre maduro, seguro de sí mismo y con un marcado código de honor, sino también porque estos papeles suelen estar enmarcados en producciones de abultado presupuesto donde la acción desmedida y la suspensión de la incredulidad por parte del espectador juegan un papel crucial. Esa eficaz combinación de elementos y su innegable carisma lo han convertido en uno de los actores mejor pagados de los últimos años. «Proyecto Rampage» se puede enmarcar perfectamente dentro de ese tipo de producción, lo que la convierte en una apuesta segura para todos aquellos que se sientan atraídos por el famoso arqueo de ceja del californiano.
Brad Peyton, responsable de dirigir la cinta y ya habituado a trabajar con Johnson (esta es su tercera película juntos), centra sus esfuerzos en establecer un equilibrio entre la acción desmedida y el desarrollo de sus personajes, pero Peyton no tiene el talento suficiente como para conseguirlo al 100%. La relación que se establece entre Davis y George en los primeros minutos es fácil de comprender y es en gran parte gracias al fantástico trabajo realizado por Weta Digital dando vida al gorila y consiguiendo que éste resulte creíble en todo momento lo que provoca que podamos llegar a preocuparnos mínimamente por él.
Enfrentamientos a lo grande
Por lo que supone al resto de personajes que pueblan la cinta, Naomie Harris es quien quizás se lleva la peor parte, ya que aunque realiza un buen trabajo, se le da un trasfondo a su personaje que no hace más que ocupar minutos innecesarios en pantalla. Esto no ocurre con otros personajes como los que interpretan Malin Akerman y Jake Lacy, responsables de encarnar a los villanos humanos de la función que, a pesar de no ser más que una pareja de yuppies megalómanos, están lo suficientemente pasados de rosca como para que las escenas que protagonizan no se hagan pesadas y lleguen a resultar incluso divertidas. Lo mismo ocurre con Jeffrey Dean Morgan, quizás el actor que más se divirtió en todo el rodaje y quien mejor consigue transmitir esa actitud de despreocupación y festividad que tan bien le sienta a la película.
Por otra parte, y dejando de lado la poca consistencia de su guion, ya que no debemos olvidar que adapta un videojuego cuya premisa era la mar de simple, «Proyecto Rampage» es un film que consigue encauzar su historia hacia un último acto que condensa todo lo que uno esperaría de una cinta del género. Una media hora final cargada de destrucción, escombros y explosiones que nos harán salir del cine con una sonrisa de oreja a oreja. Está claro que al futuro crossover entre Godzilla y King Kong le ha salido un duro competidor a superar.
Frases destacadas de «Proyecto Rampage»:
- Davis: «Rescaté a George cuando tenía dos años. No es sólo un amigo, es de la familia.»
- Nelson: «¿Es cosa mía o está mucho más grande?»
- Claire: «Hemos ido mucho más allá de la selección natural. El Proyecto Rampage funciona.»
- Davis: «Y claro, el lobo vuela.»
- Nelson: «Es curioso que prefieras la compañía de los animales a la de las personas.»
- Davis: «Estaba pensando que lo único que faltaba era un cocodrilo gigante.»