Prometemos que no decepcionarán las nuevas aventuras de Riddick aunque tampoco nos engañemos es un producto made in Hollywood hecho a la medida con el fin de hacer una gran caja.
Retorno a los orígenes…
Con el nuevo siglo nacía un nuevo tipo de héroe sideral. David Twohy comenzó con Pitch Black (2000) una de las sagas que ha generado en la red ríos de tinta. Posee cientos de fieles seguidores. Cuatro años más tarde se estrenaba la continuación Las crónicas de Riddick (2004), que a más de uno le pilló con el pie cambiado la nueva deriva de la franquicia totalmente heredera de Dune de David Lynch. El resultado es que estas “crónicas” no cosecharon el éxito esperado, aunque dieron mucho que hablar. Esta semana, y trece años más tarde, llegan las nuevas y esperadas aventuras de Riddick, y podremos valorar si el tándem Vin Diesel y David Twohy posee el tirón necesario para atraer en masa al cine a los machos alfa de los hogares españoles. Como crítico la cosa no deja de tener su morbo. En EEUU Riddick pertenece a la productora y distribuidora Universal Pictures, mientras que en España la distribuye eOne Films. ¿Acierto o error? Eso lo dirá el tiempo y los espectadores.
Lo que está claro es que esta nueva entrega posee dos objetivos claros, hacer una gran caja y satisfacer a todos los fieles de este curioso personaje, que en el fondo no deja de ser una versión cósmica y adulterada de Mad Max, que acertadamente el actor neoyorquino ha sabido darle el punto y ha conquistado los corazones de cientos de aficionados al género de la ciencia-ficción. Por estos dos grandes motivos Twohy y Diesel abandonan el escenario de la epopeya anterior y regresan a un territorio más acorde con el personaje que crearon los hermanos Jim y Ken Wheat. La película comienza con Riddick maltrecho y herido sobreviviendo como puede en un planeta inhóspito aparentemente. Riddick ha llegado a esta situación porque no andaba cómodo con la corona y hace un trato con Vaako: su corona a cambio del mapa que le lleve de regreso al planeta Furya. Pronto descubrirá que no es así, y que le han traicionado. Sólo en ese inhóspito y salvaje planeta tendrá que adaptarse a su mortífera naturaleza. Pero en su camino acabará encontrando una baliza de emergencia que alerta a dos naves espaciales, una comandada por un caza recompensas llamado Santana y otra capitaneada por un hombre de su pasado.
Riddick: esto es una cacería de xenomorfos
El largometraje posee tres partes tan acertadas como claramente diferenciadas. En la primera, recuperaremos la esencia del personaje enfrentándose y descubriendo la salvaje naturaleza del planeta donde le ha abandonado Vaako. Ese punto de monje asceta y sus estrategias adaptativas, que lo emparentan con nuestros antepasados (pinturas rupestres) es de lo mejor. En la segunda tenemos una presentación de los nuevos personajes y del conflicto interno entre ellos, estableciendo un triángulo mortal de intereses. Ahí surgirá un duro competidor. No es otro que Jordi Molla que da vida a Santana, el mercenario que quiere la cabeza de Riddick. Está genial, sabe darle el punto golfo que precisa. Y la tercera parte como decía Vasquez en Aliens: “esto es va a ser otra cacería de xenomorfos”. De esta manera es imposible aburrirse. Por su parte, Vin Diesel funciona igual de bien en las tres partes del film, sabe perfectamente que espera el espectador de él y se lo da sin remilgos. Sabe que es un personaje carismático y cuales son sus resortes.
Pero no nos engañemos, esto es una entretenida película, para pasar el rato y no pensar nada. Es el típico producto manufacturado realizado para satisfacer a un público muy concreto, con diálogos chispeantes y con miras más amplias. La única sorpresa radica en cuando ocurrirá y de qué manera ocurrirán las cosas, pero el destino final está claro. Lo que más me ha gustado del film es la referencia a Apocalypse Now al ver emerger a Riddcick del charco poco a poco como lo hacía Benjamin L. Willard en el río. Magnífico el momento. Aseguramos que esta nueva entrega de la franquicia no decepcionará a los fieles y puede que sorprenda a más de un espectador, con lo que una cuarta entrega está más que asegurada.
Frases destacadas de Riddick:
Riddick: “The question is… what happend to me?”
Riddick: “Here again, we are playing for blood”
Riddick: “Now, it’s me and this no name world”
Santana: “Shit. Here comes the neighborhood”
Santana: “Too late, too late…that’s your name”
Santana: “What do you want from Riddick? Who are you?”
Vargas: “Remember…Could be anywhere”.
Santana: “We have something in common. We don’t fuck guys neither”.