Mar. Mar 19th, 2024

Llega con más de un año de retraso una de las películas clave del pasado 2016

«Sieranevada», la cinta rumana de Cristi Puiu, fue sin duda una de las más laureadas por la crítica en el Festival de Cannes 2016. Un año y dos meses después, la esperada película que tanta expectativa levantó llega a las salas comerciales de nuestro país. No obstante, el interés suscitado por el filme del director de «La muerte del Sr Lazarescu» (2005), ha obligado a los más cinéfilelos a seguir la ruta festivalera que ha tenido este importante trabajo antes de esperar a su llegada comercial a España. Es por ello que la gran mayoría de los redactores de Videodromo nos hemos buscado la vida para poder ver «Sieranevada» en distintos festivales y muestras. Este es nuestro testimonio:

Una tarde de mayo de 2016, nos disponíamos a comenzar la competición del 69º Festival de Cannes con “Sieranevada”. Y aunque la cinta no fue incluida en el (criticado) palmarés, fue una de las más comentadas de la edición. Hay algo que atrapa en esa película. Su montaje, el paneo con el que se filman muchas de las escenas, todo nos lleva a sentirnos unos invitados incómodos en esa reunión familiar, en la que los personajes entran y sale de estancias, comentan la actualidad en un intento de arreglar el mundo. Al mismo tiempo, tratan de ignorar los problemas, más mundanos pero más cercanos, que tiene la propia familia. Cristi Puiu se toma su tiempo (173 minutos), cada personaje tiene su historia y su espacio en la trama. En una primera impresión, pudiera parecer que la película se resiente, cediendo la agilidad del montaje ante tanta conversación, ante tanto personaje entrando y saliendo de escena. Y aunque el metraje sí se antoja algo excesivo, es mérito de Puiu el lograr que el espectador sea absorbido por la película de tal manera, que acabe sintiéndose más como un vecino excesivamente curioso, involucrado a su pesar en este drama tan real como las ficciones sobre las que asientan su vida cada uno de los personajes. – IMMACULADA PILAR

Sieranevada 03

Nunca es fácil encajar una película de tres horas en un festival, más si es de una sección paralela a la Oficial. Es por ello que bastante gente en San Sebastián prefirió dejar “Sieranevada”, que participada dentro de Perlas, para una ocasión más conveniente. Tampoco el Teatro Victoria Eugenia parecía el espacio más cómodo para visionar 173 minutos de tragicomedia rumana. Pero poco importó todo ello una vez que nos sumergimos en la odisea familiar que nos propone Cristi Puiu. El director de la Nueva Ola Rumana sigue los pasos de Lary, un médico que acude a una comida organizada en casa de su madre con la mayoría de sus parientes, para conmemorar la memoria del padre, fallecido el mes anterior. Nada nos vamos a encontrar de revelador o perturbador en esta identificable reunión. Desde un humanismo en absoluto panfletario, Puiu no banaliza su retrato de una familia que no es más excéntrica que cualquier otra, sino que la risa sirve como modo de escape, como respiro del propio engranaje que él mismo ha creado: el desarrollo casi total en un espacio cerrado, sofocante, del que parece imposible salir, que funciona por la medida coreografía costumbrista que lleva a cabo el realizador, así como por la entrega de todo el reparto a la misma. “Sieranevada” destaca la importancia del clan unido, al mismo tiempo que establece diferencias irreconciliables dentro del mismo, como vemos en el enfrentamiento visceral de las ideas políticas y religiosas de las diferentes generaciones, lo que sirve como representación de un país que aún busca su identidad. – SOFIA PÉREZ DELGADO

Cristi puiu dirige esta pelicula

Gracias a “Los Golem en el Festival de San Sebastián”, ya en el pasado mes de octubre se pudieron ver en dichos cines de la capital madrileña varios títulos sobresalientes del pasado festival donostiarra. Probablemente el mejor de todos ellos era “Sieranevada”, una de esas pocas obras capaces de hacer sencillo lo complejo y que llega, haciendo valioso el viejo dicho de mejor tarde que nunca, a la cartelera veraniega.

Mediante largos planos secuencia dentro de un minúsculo y abarrotado piso, todo parece conducirnos a una historia ligada al realismo social donde las disputas familiares ocuparán el metraje a medida que revelan las grietas sociales, políticas y afectivas que cualquier reunión familiar es capaz de imponer. Y así es, pero no únicamente. Quizás la mayor virtud de Cristi Puiu es, del mismo modo que invocaba la presencia Kafkiana de El proceso (1925) en “La muerte del Señor Lazarescu” (2005), conseguir no despegarse del dramatismo realista ahondado en un bonito juego surrealista buñueliano. Y es que como en el “El discreto encanto de la burguesía”, de 1975, aquí los protagonistas tampoco consiguen nunca sentarse a comer. Esto sucede mientras el espectador no solo toma el lugar de voyeurismo involuntario de la cámara, que parece moverse como un personaje más entre los pasillos del angosto apartamento, sino que, además, esa mismas visiones de camarógrafo entrometido se convierten en una suerte de presencia fantasmal del espíritu del padre fallecido, motivo de la reunión. Todo un cocktail de influencias, herramientas y variantes que demuestran como el mejor realismo es capaz de romper y ampliar sus barreras a favor de su propia eficacia. – RAFAEL S. CASADEMONT

 laureada cinta en Cannes 2016

Vista en la muestra de cine rumano en la Filmoteca Española el pasado otoño, «Sieranevada» se podría erigir como un filme que dialoga con la idiosincrasia de su sociedad del momento. El peso de la religiosidad, la diferencia generacional entre los miembros más mayores y los más jóvenes de la familia o el maltrato físico y psicológico y la postura entre los diferentes familiares, nos hablan del seno nuclear de la casa rumana actual. El contraste y la violencia en la calle, la falta de entendimiento del matrimonio y el humor con lo que todo es tratado, nos invita a envolver a este filme dentro del ciclo en el que se programó dentro del Cine Doré. No obstante, «Sieranevada» va más allá, ya que la fluidez y el virtuosismo con el que el director irradia la cinta se debe sin duda al lenguaje innovador que aplica a la dirección del filme. El acierto de este trabajo reside en la visión panóptica de la casa que ofrece el ojo de Puiu. La cámara recorre las distintas estancias de la casa, apostando por el plano secuencia y el movimiento, mostrando siempre todo lo que ocurre a tiempo real dentro del domicilio. La comunión con lo narrado se hace tan natural, divertida y patente que los 173 minutos de duración se disfrutan de principio a fin. – LUIS SUÑER

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Hay películas que te cautivan y se hacen un hueco en el corazón del cinéfilo, y persisten en la memoria cinematográfica del cinéfilo. “Sieranevada” es el perfecto ejemplo. Todas las sesiones dentro del Chicago Film Festival colgaron el cartel de no hay entradas. Sus casi tres horas pasan como un suspiro. Es más, el filme acaba y uno se queda con ganas de seguir los avatares de la familia protagonista. Cristi Puiu tiene un ojo perfecto, elige estratégicamente dónde colocar la cámara para que el espectador se convierta en un miembro más de esa familia. Uno tiene la sensación que va andando por el piso siguiendo o acompañando a Lary, ese médico que va a pasar el sábado con su familia, porque han decidido hacer una comida especial para honrar la memoria del difunto padre. Magistral es la planificación y la dirección de actores de Puiu. Brillante como juega con la escenografía, esas puertas que se abren y cierran, marcando claramente lo que el espectador puede o no ver. El espectador sale de la sala sintiéndose todo un voyeur. Además, posee un inteligente guion que pivota con soltura entre el drama y la comedia, que explora los recuerdos, el duelo, las relaciones sociales y familiares. Es un filme imprescindible, que llega a nuestras pantallas con bastante retraso, pero que lo celebramos porque siempre es un placer ver esta maravilla al frescor del aire acondicionado de la sala cine.- ALFREDO MANTECA

Tráiler de «Sieranevada»:

 

Por Redacción Videodromo

Noticia redactada por el cuerpo de la redacción de Videodromo. Videodromo nació en diciembre del 2005 con el ánimo de dar a conocer todo lo relacionado con el mundo del cine, la televisión y el mercado DVD y Blu-Ray™.

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