El superhéroe estrella de los cómics de Marvel vuelve con una emocionante aventura adolescente.
Si hay algo que no podemos negar es que, más allá de los héroes de la Distinguida Competencia como Batman o Superman, Spider-Man es uno de los superhéroes más conocidos en todo el mundo. Es el personaje ideal con el que un niño puede sumergirse en el complicado mundo de los cómics: es divertido, visualmente llamativo, siempre intenta hacer el bien y sus problemas a la hora de compaginar su vida personal como Peter Parker con su responsabilidad como Spider-Man lo convierten en alguien con quien es fácil identificarse y al que sólo quieres que las cosas le vayan bien. «Spider-Man: Homecoming» tiene sus pros y contras, puede divertirte más o menos, pero es innegable que Jon Watts y su equipo de guionistas han captado lo esencial de lo que es el personaje y de lo que representa.
Peter Parker (Tom Holland) comienza a experimentar su recién descubierta identidad como el superhéroe Spider-Man. Después de la experiencia vivida con los Vengadores, Peter regresa a casa, donde vive con su tía (Marisa Tomei). Bajo la atenta mirada de su mentor Tony Stark (Robert Downey Jr.), Peter intenta mantener una vida normal como cualquier joven de su edad, pero interrumpe en su rutina diaria el nuevo villano Vulture (Michael Keaton) y, con él, lo más importante de la vida de Peter comenzará a verse amenazado.
Un protagonista memorable
Si algo realmente bueno tiene «Spider-Man: Homecoming» es que es consciente de sus propias limitaciones. No veremos una invasión a gran escala con un rayo azul que atraviesa el cielo, ni tampoco la historia más grande y definitiva del trepamuros; sino la clásica trama en la que nuestro amistoso vecino debe impedir que un supervillano campe a sus anchas al mismo tiempo que cumple con su horario escolar, hace los deberes, cuida de su tía May y hace lo posible porque la chica que le gusta se fije en él. Esta película no es más que un episodio en la etapa del personaje que se preocupa en mostrarnos que nuestro protagonista ha aprendido una valiosa lección por el camino y que, pasito a pasito, se irá convirtiendo en el gran héroe que todos conocemos.
Tom Holland deja claro que es la elección ideal para el papel. Por si a alguno le quedaron dudas después de su presentación en «Capitán América: Civil War» (Anthony & Joe Russo, 2016), aquí Holland nos muestra que lo da todo en cada escena. Es todo un disfrute verle en la piel del personaje durante los primeros compases de la película, contagiándonos esas ganas por salir a patrullar las calles y balancearse por la ciudad. El joven actor se desenvuelve muy bien al interactuar con el resto de personajes y resulta creíble en todo momento, especialmente con Ned (Jacob Batalon), su mejor amigo y cómplice. Pero a pesar de que Tom Holland sea el que carga con gran parte del peso de la película, es Michael Keaton quien se lleva la mejor parte. Keaton ha tenido la suerte de contar con un papel como supervillano interesante, con las motivaciones claras y que representa una amenaza evidente para nuestro protagonista. El veterano actor se muestra encantado con su papel, por lo que esa confianza y entusiasmo traspasan la pantalla, dejándonos más de una escena clavada en la memoria.
El cómic cobra vida
Jon Watts, quien hace un par de años nos sorprendió a muchos con «Coche Policial» (2015), a pesar de ser este su segundo largometraje y encontrarse bajo la presión de un gran estudio, hace todo lo posible para que conectemos con el personaje y entendamos no sólo lo que le ocurre, sino qué le preocupa y qué quiere conseguir. Los cambios que se han hecho con respecto al material original pueden molestar al fan veterano y puede que algunas cosas sigan la «plantilla Marvel Studios»: como la necesidad de que haya comicidad en todo momento y que aparece por sorpresa en algunas escenas dramáticas o tensas; pero todo eso queda relegado a un segundo plano cuando nos damos cuenta de que las dos horas y trece minutos que dura la película se nos han pasado en un suspiro. El trabajo de Michael Giacchino en las partituras, a pesar de sonar convencional, cuenta con un tema principal bastante pegadizo y que refuerza esa sensación de película liviana, despreocupada y clara en su estructura.
En «Spider-Man: Homecoming» abunda la comedia. Es un humor blanco e inocentón, que aunque pueda no ser el favorito de algunos, le va como anillo al dedo al personaje y a ese tono de filme de instituto que impregna la cinta. Aunque la estructura de la película sea sota-caballo-rey, sabe tocar las teclas en el momento justo y añadir elementos nuevos para que su conjunto no resulte demasiado predecible ni convencional. Es abrumador pensar la cantidad de niños y no tan niños cuyo primer encuentro con el trepamuros será esta película y que, seguramente como ya ocurrió en 2002, marque a una generación y les enseñe que un gran poder conlleva una gran responsabilidad.
«Spider-Man: Homecoming» no es la película de superhéroes definitiva, pero transmite esa sensación de las mejores adaptaciones de cómic: parece que sus personajes y sus historias han cobrado vida ante tus ojos. Es todo un gozo ver al personaje siendo él mismo, sin intentar volvernos a colar su origen, simplemente divirtiéndonos y emocionándonos. Esta es la película veraniega ideal: ligera, espectacular y con corazón.
Frases destacadas de «Spider-Man: Homecoming«:
- Tony Stark: You just don’t do anything I would do… and definitely don’t do anything I wouldn’t do. There’s a little gray area in there and that’s where you operate.
- Peter Parker: I’m sick of Mr. Stark treating me like a kid.
- Ned Leeds: Oh I was just um… Looking at… Porn.
- Peter Parker: I’m nothing without the suit!
- Tony Stark: Can’t you just be a friendly neighborhood Spider-Man?
- Adrian Toomes: The rich, the powerful, like Stark, they don’t care about us! The world’s changed boys, time we change too!
- May Parker: You need to stop carrying the weight of the world on your shoulders.
- Peter Parker: So, to become an Avenger, are there like trials, or an interview.
No digo que la película no sea buena, pero no repetir el origen para meternos por TERCERA vez en su paso por el instituto tampoco es que me haya emocionado. Y Marvel marcando el terreno, con ese Iron Man que parece la piedra angular de todo lo que se cuece…
Hola Chacal, gracias por comentar. En cuanto a lo de la enésima etapa de instituto, no puedo rebatírtelo porque puedo entender que canse ver a Spider-Man en el mismo ambiente, pero tiene sentido si lo que se quiere es exprimir al personaje al máximo, ya llegará J.J. Jameson y la vida adulta del personaje, es inevitable.
Por otra parte, Iron Man es la piedra angular del UCM porque es que fue su primer superhéroe y ha acabado siendo el desencadenante de todo. Es un poco bisagra en ocasiones, pero cierto es que el personaje da para todo eso, es el que tiene el arco más completo de todos los personajes. A partir de Infinity War las cosas van a cambiar, esperemos que hacia unas películas más variadas. Paciencia.