Después de nuestra aproximación a los 28 minutos iniciales, íbamos preparados a la película, ¿o no? Hablamos del desastre que es Star Trek: en la oscuridad.
Una vez más, la segunda opinión que esta web manifiesta en torno a Star Trek: en la oscuridad demuestra que no hay dos opiniones iguales y cómo un mismo producto puede sufrir críticas opuestas. Si a Alfredo le gustó, yo no puedo decir lo mismo.
Como dije cuando vi los primeros 28 minutos de la película soy fan de la primera entrega. Me pareció muy interesante ver cómo había tratado J.J. Abrams el universo Star Trek para generalizarlo, respetarlo y reconstruirlo. Sin embargo, después del visionado que había hecho, acudí en esta ocasión algo escéptico. Y ni eso consiguió salvarme del disgusto.
Trama errática y descontrolada
Se que es el argumento más sencillo, pero comenzaré por ahí porque dudo que todo se deba a la casualidad: guión que toca Damon Lindelof, guión que se pierde en su propia historia. No creo que este sea un caso distinto. La película que comienza con mucha fuerza se va desinflando según los minutos pasan, pues está protagonizada por unos personajes que se dejan llevar por una situación sin tomar la iniciativa en ningún verdadero instante. Al principio parecen tener un objetivo claro, pero una vez lo alcanzan (y esto sucede a mitad de película) se sienten perdidos, no saben ya qué hacer y lo único que se les ocurre es ponerse a la defensiva de todo lo que sucede y ver cómo solucionan cada cosa a su tiempo.
William Goldman uno de los guionistas más consagrados de Hollywood decía que una de las premisas principales a la hora de escribir guiones es que a las escenas hay que «entrar tarde y salir pronto«. En resumen, lo que quiere decir esta indicación es que se ha de contar lo fundamental y que si algo se deja fuera para causar inquietud en el espectador, pues mejor que mejor. Y la película de J.J. Abrams tiene un error brutal en esta cuestión: no es sólo que no entre pronto, es que sale muy tarde. Estira las escenas como si de un chicle se tratasen hasta límites insospechados, todo ello por temor a que el espectador (tonto él) no pueda comprender qué está pasando en la escena si no se le muestra explícitamente un mínimo de tres ocasiones. Todo esto teniendo en cuenta que quizá la audiencia esté tan metida en la acción de la película que sea incapaz de escuchar a los personajes, pues los guionistas han construido a Bones (Karl Urban) como el personaje que representa al espectador. Al espectador poco astuto, claro, pues su función básica en la película es subrayar en forma de palabras, escena a escena, qué está ocurriendo en ese instante en la película. No vaya a ser que alguien no lo haya podido comprender.
La película también se sustenta sobre la base de ser una historia mucho más oscura, pero se acaba quedando en una superficie decepcionante. Como la grandeza de todo buen héroe se basa en cuán grande es el villano, la fuerza de la película se basaba en John Harrison (interpretado por un increíble Benedict Cumberbatch), archienemigo que al final deja mucho que desear. Sí, tiene presencia, eso es innegable y sin duda el paralelismo creado entre él y Kirk (Chris Pine) y Spock (Zachary Quinto) le aporta a la historia. Pero de nada sirve a eso cuando la motivación del personaje acaba siendo la más hegemónica de la historia de la literatura y se nos presenta de misma forma. No hay nada nuevo, pero sí mucho trillado. El personaje de Harrison (más por su presencia y presentación como personaje que por lo realizado) interesa al espectador desde el primer instante, pero en cuanto revela su identidad e intenciones carece ya de nada que le haga único. Desarrolla su plan de la forma más repetitiva posible, con las mismas «motivaciones», mismos puntos de inflexión y mismos incluso gestos que se han visto innumerable veces más en la pantalla. La fuerza de los orígenes del personaje se desvanece con sus acciones en el presente, haciendo que lo que podría haberse construído como un magnífico personaje acabe por convertirse en un villano de opereta, más plano que la tabla de una mesa (lo siento, Benedict, te juro que no te echo la culpa a ti).
Así, con diálogos ofensivos por obvios que, además, se encargan constantemente de resaltar lo evidente, una banda sonora que te guía sentimentalmente a cada paso que da el metraje (y que lo siento, J.J., pero a mi no me sirve como única base para lograr emocionarme) y un universo que se adapta a los personajes de forma que les crea obstáculos sin que en realidad les acaben creando demasiados problemas; Star trek: en la oscuridad se trata de una película en la que constantemente, por poco cine que hayas visto, sabes lo que va a suceder en la trama con unos 10 o 15 minutos de antelación. Y yo, personalmente, para ver otra vez la misma historia pero con distintos personajes, pues no voy al cine, oye.
El curioso universo futurista de Star Trek
Por cierto, una de las cosas más curiosas que he visto del mundo futurista de Star Trek es la vestimenta oficial de la Flota Estelar. El hecho de que el traje oficial de las mujeres en dicha flota esté compuesto por un vestido de pieza única con falda muy corta y el uso de pantalones se vea relevado a los momentos en el que las mujeres abandonan la nave y tienen que ponerse otra vestimenta más «especializada» me parece, como mínimo curioso, en una supuesta institución que cuida de la igualdad de géneros, pero que desde su vestimenta ya está haciendo división en ella (y en la que por cierto, en ningún momento se ve a una mujer en un alto puesto, ni al mando de una nave ni como primer oficial).
No quiero hacer un mundo de ello, pero ahí lo dejo.
Así, la secuela de este reboot/remake iniciado por J.J. Abrams, al final, trata de ser más que su predecesora. Más grande, más ambiciosa, más intensa. Pero ya sabemos que quien mucho abarca poco aprieta.
Frases de Star Trek: en la oscuridad:
John Harrison: Ninguno de vosotros está seguro. ¿Tengo vuestra atención ahora?
John Harrison: ¿Qué no harías por proteger a tu familia?
Bones: ¿Sabes? Cuando soñé con estar atrapado en un planeta desértico con una mujer despampanante no había ningún misil involucrado.
Kirk: Estoy asustado, Spock. Ayúdame. ¿Como consigues no sentir nada?
Spock: No lo sé. Ahora mismo estoy fallando.
Ya la he visto. Y es como todas las pelis que últimamente se estrenan como taquillazos: muy molonas, muy trepidantes, muy ruidosas, pero con un guión lleno de agujeros.
Y a partir de aquí, van los SPOILERS:
-Kirk es degradado y enviado de vuelta a la academia por pasarse las normas por el arco del triunfo. Eso por la mañana.
-Por la noche, es reasignado como primer oficial. Merecía una segunda oportunidad, porque es «la persona más noble» que conoce el almirante. Pues si el guionista considera noble a alguien que la pifia y lo omite en el informe, para librarse de la reprimenda…
Khan huye tras su atentado en la Tierra desde una pequeña lanzadera teletransportándose a Kronos. Se acepta que esté usando tecnología superior, pero una cosa es que el teletransporte tenga algo más de alcance que el convencional, pero es que este tío se ha trasladado a otro planeta que sabe dios a cuántos parsecs dista.
Por contra, Kirk luego baja con sus chicos a Kronos, pero esta vez sin ninguna justificación (alcance excesivo, interferencias, etc) lo hace en lanzadera en lugar de teletransportarse. ¿Por qué? Porque el guionista quiere colarnos una escenita de persecución de naves entre complejas estructuras, muy molona, muy trepidante, muy ruidosa.
Spock joven entra en contacto con Spock viejo para que le cuente lo que sepa de Khan. El viejo le dice que no debe revelarle nada para evitar paradojas temporales, pero a los dos segundos ¡lo hace!
Khan y Kirk salen escupidos con escafandra de la Enterprise por una especie de tubos lanzatorpedos para abordar otra nave. Otra escena la ostia de molona. En el proceso deberían haberse roto la mitad de los huesos; Khan quizás no, que es de otra pasta, pero Kirk sí.
Scotty está en la otra nave esperándolos en el hangar de carga. Tiene que abrirles la compuerta, lo que implica exponerse a la descompresión de la cámara, es decir, el riesgo de salir despedido, de congelarse, de asfixiarse (a saber qué iría primero). Si fueran coherentes, habría un mando en un cuarto contiguo, pero así mola más. Ah, pero al escaparse el aire, éste debería rechazar a los visitantes. No sucede; entran a lo bruto, de nuevo sin romperse los huesos. Estos chicos son la leche.
La Enterprise pierde impulso estando a 600.000 km de la Tierra (o sea, un poco más allá de la Luna). Pues inmediatamente empieza a caer en línea recta hacia la superficie del planeta. Nada de trayectorias hiperbólicas, a la mierda con Kepler y Newton. Así mola más.
Las licencias de guión se admiten según el entorno en el que nos movamos. Se acepta que los lasers de Star Wars hagan ruido y se vean, porque es una space-opera. De Star Trek no hay que esperar que sean fieles a la física como en 2001, pero sí que lo sean como en las series de TV o las otras películas, al menos.
Ahora bien, si todos los taquillazos nos rebajamos al nivel Fast and Furious, así no hay nada que hacer.
jmongil ahora mismo te besaría durante varias horas por tu comentario. No quería meterme a analizar nada más en detalle por la cosa de los spoilers y tal. Pero no ha hecho falta, creo que HAS DICHO TODO lo que querría haber dicho yo.
jmongil ahora mismo te besaría durante varias horas por tu comentario. No quería meterme a analizar nada más en detalle por la cosa de los spoilers y tal. Pero no ha hecho falta, creo que HAS DICHO TODO lo que querría haber dicho yo.
A ver señores, haya paz o tengo que sacar el sable laser. Entiendo lo que queréis decir, pero a ver, al igual que no le pedimos a Star Wars un mínimo de credibilidad obviamente no se la pido a Star Trek y menos a JJ Abrams, rey de las incoherencias. Hay que reconocer que la película entretiene y que Bendicto está genial. Otra cosa es la de leyes físicas que se salten para hacer momentos espectaculares. La pregunta que os hago a los dos es ¿os entretuvo? A ver que Abrams no le llega a Kubrick ni al dedo meñique del pie derecho. Eso lo tenemos todos claro.
Es que a mi no me entretuvo, esa es la cuestión. Y tampoco le voy a atacar cosas de que sea similar a la física actual. La película crea un mundo establecido por ella y es cuando no tiene lógica con él cuando se le puede criticar.
Ahora, SPOILERS:
La caída de la nave, que la gravedad se mueve por la posición de la nave, guay. Pero que lo haga sólo de lado y recto sí que me chocó. Así que la gravedad complica las cosas, pero lo suficiente para que no termine de molestar del todo. Cosas de boca abajo o así, no, ¿no?
FIN SPOILERS
Esas pequeñas cosas. Pero vamos, que no es por eso sólo por lo que no me gustó. Fue una cuestión más de ritmo y repetición de unos puntos sin originalidad ninguna (desde mi punto de vista).
Alfredo. Empiezo respondiendo a tu pregunta: a ratos.
La verdad, estoy harto de escenas trepidantes, en las que no se ve un pimiento y en las que te quedas sordete. A lo mojó me estoy haciendo viejo. Me aburren las escenas de tensión en las que ya sabes lo que va a pasar.
Scotty se amarra antes de abrir la escotilla, aparece un malo y le encañona con una pistola, mientras los dos viajeros están a punto de esmorrarse contra la escotilla. Y la escena se alarga y alarga y alarga con más y más gritos y música estridente, hasta que se resuelve como todos bien esperábamos. Coñazo.
Kirk se mete en el reactor, llega trabajosamente hasta él, mientras la nave cae dando vueltas y vueltas (vaya usted a saber por qué). Hasta que llega y se lía a patadas con el núcleo. Literalmente lo arregla a patadas. A mi estas mierdas de escenas ya no me incitan a morderme las uñas. Me producen bostezos.
A ver Alfredo.
Estoy de acuerdo con Arturo: Cada película se debe ajustar a su marco refencial.
Star Wars tenía el suyo. En él se admite que los lasers hagan ruido y se vean. Pero no que de repente aparezcan (Santi, perdona que tome prestada una de tus frases) unicornios nazis escupiendo fuego y montados por aristogatos. El guionista se estaría saliendo del marco referencial. Sería inadmisible.
2001 tiene el suyo, mucho más estricto.
El marco del Star Trek lo encontramos en sus anteriores películas (casi todas horribles) y sus series. Vale que Abrams, al reinventar parcialmente la saga, puede definir un nuevo marco referencial, pero siempre similar al anterior, aunque en el proceso espante a los trekies (si hace falta, que se jodan), pero nunca a cambio de seducir segmentos más amplios de público como los «oligos» que tienen orgasmos con Fast and Furious (¡mola chaval!).
Pero es que esta vez se ha pasado.
Otra cosa: el aspecto moral. Entiendo que los guiones no tienen que ser moralistas ni ejemplarizantes. Estaríamos listos.
Pero en las dos de Star Trek ya no estamos ante la dichosa superación personal (onmipresente en casi todo lo que hace Jolivuz). Kirk en la primera peli es un gamberro y un fresco (eso sí, guapete) que alcanza la jefatura de la nave insignia de la Flota Estelar mediante una trayectoria vergonzante. En la segunda lo degradan y a las pocas horas consigue un nuevo destino; ni castigo ni leches. En ambas pelis se exalta la chulería, el molonismo, la vía rápida.
¿El esfuerzo? Quita, déjate de rollos, tío.
He de reconocer mal que me pese que tienes muchísima razón en lo que dices, y argumentado de esa manera sólo me queda que darte la razón, que motivos tienes y de peso. De hecho al salir, una de las cosas que más hablamos es para qué existen las reglas si no haces más que saltártelas, Abrams no deja de ser un Kirk, se pasa todo por el forro, y nosotros acabamos encumbrándole. Ains, Arturo y tu tenéis razón. ¿Y qué te pareció Bernardo?
Abrams hace lo que le sale del ojete y obtiene buenos resultados en taquilla. Así que probablemente con la franquicia Star Wars hará lo mismo. Pero en este último caso, tampoco es tan dramático, porque el propio Lucas hacía lo mismo y le traía al pairo.
¿Bernardo? Te debes estar refiriendo a Benedicto, ¿no? (el actor, no el co-papa).
Pues el pobre hace lo que puede, pero su papel no da para mucho más. Como hace todas sus maldades en solitario, sólo tiene diálogos con los buenos y son más bien pocos. El resto de su intervención es en plan arf, ugh, brr y jadeos varios.
Por contra, Ricardo Montalbán, en su mismo personaje, tenía bastantes más diálogos porque interaccionaba con sus subordinados. No obstante, todo más patético, como el resto de aquella película.
JAJAJJAJJA si me había equivocado, me refería a Benedicto. Pues a mi me pareció lo mejor de la función y en inglés más. Una pasada su voz. Y le momento cuando dice yo soy Kahn el cine incluido yo que ya me dejaba llevar hicimos un sonoro OHHHHHHH!!!! Sorpresón del grande. Fue un momento de esos en plan Luke, yo soy tu padre.
¿En serio?
A mi ese momento me pareció demasiado grandilocuente. Porque ya lo sabía y porque ya conocía ese personaje por la otra peli, que si no habría pensado «ya, y a mí qué».
Por contra, cuando hacia el final Spock grita «Khaaaaaaaan», casi vomito. Porque es un homenaje a la peli antigua y una imitación a Kirk en la escena correspondiente. Lo malo es que en esa escena William Shatner lo hace como el culo (como siempre).
Pues es que yo no sabía nada, de nada. Y me sorprendió. Porque imagina en inglés y a Benedicto a tope de metido en el rollo Kahn, pues a todos nos dejó locos. Fue el sorpresón. Y así que me llevó a la consabida segunda parte de la franquicia. Y mira tu por donde que no tengo tan mal recuerdo de ella. Creo que si la viera ahora vomitaría. Posiblemente.
Kahn no.
Khan.
Perdón, perdón.
La verdad es que la saga de Star Treck es un poco cansina, pero al menos ha innovado.
Pero no deja de ser un tanto entretenida esta nueva entrega, aunuqe de verosimilitud no hablamos amigos Félix Redondo
Buenas tardes señores, acabo de salir del cine y he de decir unas cuentas cosas sobre lo comentado aquí:
1-He visto comentarios que dicen que la película es una exaltación de la vía rápida y el «molonismo». Hombre creo que esto es exagerado, Kirk es cierto que se pasa por el arco del triunfo las normas en el comienzo y es castigado por ello, si le devuelven el mando del enterprise (a parte de sus contacto obvio que le ayuda también en la primera película) es debido a que todo es un complot del alto cargo de la federación para una corrupción armamentística. Ello explica la incursión de nuevo de Kirk como peón de esta estartegia. Además Kirk asume su RESPONSABILIDAD para salvar a la tripulación, del mismo modo muere literalmente por salvar su nave, probando su valentía y «pelotas» pues no todos las tiene llegado el caso por muy capitanes que sean, asique en mi opinión, este Kirk evoluciona del gamberrete de la primera película. Por lo tanto no se exalta nada, sino que todo lo contrario te demuestar que avces hay que tomar decisiones difíciles y arriesgar tu propia vida para ser un auténtico capitán, además de aprender de los erorres. Si eso no es exaltar los buenos valores y cargarse el «molonismo» y la chulería, no se lo que es.
2-Del mismo modo puedo observar críticas sobre la física de la caída del Enterprise a la órbita de la misma. Por el amor de Dios es una película de ciencia ficción que además si nos ponemos así encontramos cientos de fallos, esto no lo jsutifica y supone una escena de acción y efectos especiales imprrsionantes que si los comparamos con las anteriores versiones de Star Trek (series y películas) los deja literalmente en pañales. Por ello amigos no seamos exagerados y hagamos de una película que relata viajes entre galaxias, teletransportaciones a velocidad de hiperespacio y hombres con orejas puntiagudas un análisis físico real porque entonces es sinceramente poco menos que para partirse de risa de los surrealista que es analizarlo así, disfruten de los efectos y del buen hacer de J.J. Abrams y su equipo de trabajo, que han llevado esta serie a otro nivel antes insospechado.
3-Marco referencial: Como fan de la saga, he de decir que el marco referencial está intacto sin duda alguna, pues la esencia de los personajes principales y el desarrollo paralelo de la historia en la que se ven inmersos no desentona en absoluto, sino que incluso se consigue juntar la esencia de la saga de los años sesenta, con la tecnología de ahora y no sólo a nivel estético, sino incluso a nivel argumental (aparición de Spock
Buenas tardes señores, acabo de salir del cine y he de decir unas cuentas cosas sobre lo comentado aquí:
1-He visto comentarios que dicen que la película es una exaltación de la vía rápida y el «molonismo». Hombre creo que esto es exagerado, Kirk es cierto que se pasa por el arco del triunfo las normas en el comienzo y es castigado por ello, si le devuelven el mando del enterprise (a parte de sus contacto obvio que le ayuda también en la primera película) es debido a que todo es un complot del alto cargo de la federación para una corrupción armamentística. Ello explica la incursión de nuevo de Kirk como peón de esta estartegia. Además Kirk asume su RESPONSABILIDAD para salvar a la tripulación, del mismo modo muere literalmente por salvar su nave, probando su valentía y «pelotas» pues no todos las tiene llegado el caso por muy capitanes que sean, asique en mi opinión, este Kirk evoluciona del gamberrete de la primera película. Por lo tanto no se exalta nada, sino que todo lo contrario te demuestar que avces hay que tomar decisiones difíciles y arriesgar tu propia vida para ser un auténtico capitán, además de aprender de los erorres. Si eso no es exaltar los buenos valores y cargarse el «molonismo» y la chulería, no se lo que es.
2-Del mismo modo puedo observar críticas sobre la física de la caída del Enterprise a la órbita de la misma. Por el amor de Dios es una película de ciencia ficción que además si nos ponemos así encontramos cientos de fallos, esto no lo jsutifica y supone una escena de acción y efectos especiales imprrsionantes que si los comparamos con las anteriores versiones de Star Trek (series y películas) los deja literalmente en pañales. Por ello amigos no seamos exagerados y hagamos de una película que relata viajes entre galaxias, teletransportaciones a velocidad de hiperespacio y hombres con orejas puntiagudas un análisis físico real porque entonces es sinceramente poco menos que para partirse de risa de los surrealista que es analizarlo así, disfruten de los efectos y del buen hacer de J.J. Abrams y su equipo de trabajo, que han llevado esta serie a otro nivel antes insospechado.
3-Marco referencial: Como fan de la saga, he de decir que el marco referencial está intacto sin duda alguna, pues la esencia de los personajes principales y el desarrollo paralelo de la historia en la que se ven inmersos no desentona en absoluto, sino que incluso se consigue juntar la esencia de la saga de los años sesenta, con la tecnología de ahora y no sólo a nivel estético, sino incluso a nivel argumental (aparición de Spok de antaño) junto con el nuevo (impresionante parecen clones) y además que quede encuadrado separando amabas historias en el espacio tiempo y nunca mejor dichio de manera fidedigna e impresionante. Tanto Kirk cómo Spok dan un nuevo salto cualitativo en este film y se profundiza tanto en su amistad cómo en su desarollo, algo que depende exclusivamente de Abrams y su equipo de guionistas, pues esta película no es un disparate de acción y efectos especiales sin mirar el desarrollo de los personajes ni mirar el desarrollo dramático de los mismos antes las diversas elecciones que toman y por tanto el arco de la personalidad en los mismo y su adaptación al medio. Por tanto no creo que el marco referencial este «desvirtuado» para nada en mi opinión.
4-Khan es increible y si han visto la película antigua de «Star Trek II: The Wrath of Khan» sabrían de lo que hablo, porque el de esa peli si que es de risa y patético, mientras que est adquiere un nivel psicológico y físico realmente potente. El actor que da vida a este personaje al igualq ue en la serie de Sherlock, muestra una interpretación más que solvente y dota a este personaje de un sello propio que deja huella tras ver el final y el papel que ha jugado levando al límite los personajes.
Por tanto finalizo mi argumentación, diciendo que cómo fan me ha encantado, que como espectador de cine esceptico me ha ilusionado, pues considero que aún se pueden hacer superproducciones con un gran argumento y desarrollo de los personajes (algo que Nolan en la última de Batman y Snyder en la última The man of Steel deberían tomar buena nota) en todo el metraje. Si a eso asumimos que vamos a ver un a película de star trek y no un documental con físicos cuánticos sobre las visicitudes del universo, estaremos preparados para entnder que J.J. Abrams ha ello un trabajo increíble por varios hechos:
-Respeta la esencia original de la serie de antaño tanto en los eprsonajes, como en el guión cómico en ciertos momentos y sus constantes guiños.
-LLeva la serie a otro nivel Star Trek en lo referenete a originalidad (une lo antiguo con lo nuevo sin repetir) que ya les gustaría a todas esa películas de Star Trek y la dichosa nueva generación que eran más bien tristonas y un refrito de las primeras.
-Parace haber clonado a Kirk y a Spok.
-El personaje de Khan está más que jsutificado y mejorado en esta cinta y representa un villano digno de principio a FIN (no como Bane en TDKR).
-EL ENTRETENIMIENTO que es de lo que va Star Trek y nunca pasó de ser algio mas en este historia de viajeros de los confines espaciales, esta no sólo asegurado, sino que incluso se ha llevado a otra dimensión para la actualidad.
Por todo esto doy a la película un 8 sin pensármelo dos veces. No me cabe duda de que esta existosa saga tendrá una tercera parte (esperemos que mantenga el nivel pues el listón está bien alto) y que del mismo modo Abrams hará un gran trabajo sin sigue en esta línea en lo que al futurible Episodio VII de Star Wars se refiere. Buenas tardes y feliz verano a todos.
Botvin
Lo siento, pero tu réplica no me convence.
1.Argumentas que la devolución del mando a Kirk es un eslabón del complot dentro de la Flota Estelar. Visto así, Kirk no merece su rehabilitación. Luego queda claro que ese personaje no deja de ser más que un chulo de mierda.
El problema es que es el propio almirante Pike (que no forma parte del complot) ante su jefe (que sí forma parte) el que intercede de la mañana a la noche en favor de Kirk. Por tanto, no cuadro lo que cuentas.
De todos modos, tú como fan de Star Trek que dices ser, deberías ser sensible al hecho de que Kirk se ha pasado por el arco del triunfo la primera directriz (sí, es verdad, para salvar a su amigo). En las series dejan bien claro la importancia de dicha directriz. Aquí, en esta peli, prácticamente es una cuestión que se soslaya. A Kirk parece que le importan un pimiento las consecuencias de su acto. Y tal como está contada la peli, al público ajeno al marco referencial de Star Trek no se le explican las consecuencias de su violación. Simplemente pensarán que Kirk mola, que ha salvado a su amigo y que las normas son un rollo y que están para ser violadas. En suma, que el fin justifica los medios.
En cualquier caso, admite al menos que eso de ser degradado enviándolo de nuevo a la academia es de traca. Podían haberlo enviado a otra nave, degradado a suboficial, o enviado a pelar patatas a la cocina de la nave. Pero de vuelta a la academia…
2. La caída de la nave es una burrada sin más, un mero pretexto para una escena molona. En un marco referencial como el de Star Wars, sería una escena totalmente válida. En Star Trek, no.
Por ejemplo, en Star Trek Generations, separan el sector discoidal de la nave. Tras una explosión de la otra parte, dicho sector, que no se ha tenido tiempo suficiente para alejarse, es afectado por la onda expansiva, haciendo que se precipite con la atmósfera del planeta. Ésta frena su velocidad provocando su caída violenta hacia la superficie.
Estamos ante una escena, que si bien probablemente no sea del todo fiel a las leyes de la ciencia, tiene su parte de verosimitud y coherencia con el resto de la saga. Indudablemente fue concebida para dar un climax molón al final, pero el guión y el marco referencial no se resienten.
En cambio en esta última película, con la caída desde el quinto pino y otro montón de barbaridades ajenas a lo que es habitual en la saga Star Trek, Abrams demuestra que está haciendo lo que le sale del nabo.
3. Con lo dicho en los puntos anteriores creo que no queda mucho más que añadir.
4. No niego las virtudes artísticas del actor de Khan. Pero su papel es burdo y absurdo. Le dejan hablar poco, y el resto es pura acción en la que se limita a poner cara de borde y jadear. Poco más. El pobre debió aceptar el papel por los cuartos.
El guión está plagado de agujeros. Pero está claro que a la gente en general le importa un pimiento. La productora se limita a concebir escenas molonas. A continuación se inventan un guión que hilvane todos estas escenas molonas. Desgraciadamente fracasa.
Un ejemplo: la peli empieza con la nave sumergida en el mar de un planeta al cual han enviado a los protas a que arreglen una cosa discretamente. Propicia una escena molona, la emersión de la nave. ¿Tiene lógica? Ninguna. Las naves grandes de la saga Star Trek no están diseñadas para aterrizar (salvo la Voyager) ni para amerizar. Para enviar gente a superficie discretamente, la nave se queda en órbita y las teletransportas. Salir de repente del mar, justo al lado de la costa es un cante de cojones.
En suma, una escena que no tiene ni pies ni cabeza. Pero mola, que por lo visto, es lo que debe importar. No acepto este criterio. Esto no es cine; es bazofia.
A mí ni siquiera me parece entretenida. Esos climax son predecibles. Apenas buscan sorprender. Bah, un rollo.