Mar. Mar 19th, 2024
Se ha estrenado en Netflix The Cloverfield Paradox

La inesperada franquicia vuelve con fuerza gracias a una arriesgada campaña promocional.

Una franquicia impredecible

En 2008 la productora Bad Robot, propiedad de J.J. Abrams, llevó a cabo una enrevesada maniobra de márketing que demostró hasta que punto se podía llevar a cabo la publicidad de una película a través de internet. Ocho años después se estrenó «Calle Cloverfield 10» (Dan Trachtenberg, 2016), una película que supo mantenerse bajo el radar hasta poco después de su estreno en salas para sorprendernos con un final que la relacionaba directamente con «Monstruoso«. Y hace apenas unas horas, una tercera parte ambientada en el mismo universo que la película de Matt Reeves se ha estrenado por sorpresa en la todopoderosa plataforma de video on demand, Netflix.

Puede que estas tres películas no estén a la altura de las expectativas que levantan tales estrategias publicitarias, pero está más que claro que han conseguido crear escuela. Si «Monstruoso» era un soplo de aire fresco en el (ya entonces) sobreexplotado found footage y «Calle Cloverfield 10» un buen ejemplo de historia embotellada con varios ases en la manga, «The Cloverfield Paradox» es una locura espacial donde las leyes de la lógica y de la física son sustituidas por el caos más absoluto.

En plena escasez energética y con una guerra en ciernes, la ESA recluta a un grupo de científicos para llevar a cabo un experimento que, de salir bien, podría dar una segunda oportunidad a la humanidad. Sus intentos por crear un nuevo tipo de energía limpia y renovable tendrán unas consecuencias totalmente inesperadas.

Un guión con tantas sorpresas como errores

Si bien la película dirigida por Julius Onah puede recordarnos a simple vista a otras obras del mismo género recientes como «Life (Vida)» (Daniel Espinosa, 2017), lo cierto es que la cinta que nos atañe se adentra en un terreno totalmente diferente y cuenta a su favor con decisiones no sólo más alocadas, sino también mas autoconscientes con el tipo de producto que es y, sobretodo, que quiere ser. Los primeros treinta minutos de la cinta son claros, directos y una completa locura. No sólo nos presenta con rapidez a nuestra protagonista, Hamilton (Gugu Mbatha-Raw), sino también su tripulación y todo el tiempo que llevan fuera de La Tierra y lo que eso supone para su salud mental. Cuando parece que han alcanzado su objetivo, la trama se complica hasta límites difíciles de imaginar. Es quizá esa sensación que impera durante prácticamente todo el metraje, donde parece que todo vale en la historia y que no hay unas normas básicas sobre las que sostenerse, lo que puede hacer que más de uno arquee una ceja a causa del escepticismo. «The Cloverfield Paradox» parte de una base científica todavía hipotética y la aprovecha para sorprender al espectador cada vez que se le presenta la oportunidad, lo que puede causar rechazo o, por el contrario, alimentar esas ganas de diversión y sorpresa que pueden aflorar en nuestro interior si aceptamos la propuesta con agrado.

el reparto lo integran  Gugu Mbatha-Raw, David Oyelowo, Daniel Brühl

Gugu Mbatha-Raw realiza una interpretación sobradamente creíble para una cinta que no dedica demasiado tiempo al desarrollo de sus personajes, siendo únicamente el personaje de Hamilton el que tiene un planteamiento sólido y del cual conocemos a la perfección las motivaciones que impulsan sus actos. Pero por desgracia, el resto de la tripulación no son más que secundarios que, a excepción quizás de Daniel Brühl y Elizabeth Debicki sirven simplemente como alivio cómico o como recurso para que la trama avance. Igual pasa con Roger Davies, quien encarna a Michael, el esposo de Hamilton y protagonista de una trama que transcurre paralelamente en la Tierra. Desgraciadamente, la interpretación de Davies no consigue subir una sub-trama que se desinfla con rapidez y que, salvo sus conexiones con las cintas previas, no tiene demasiado interés.

«The Cloverfield Paradox» es un thriller que no oculta sus referentes y que se preocupa más que su entrega previa por hacer que la historia se encuentre más integrada que en la saga, a pesar de descuidar otros puntos igual de importantes. Aun así, la cinta sabe cómo captar el interés del espectador, convirtiéndose en entretenimiento puro y duro donde la tensión y el desconcierto están a la orden del día.

Frases destacadas de «The Cloverfield Paradox»:

  • Mundy: «Hey guys, check out my arm. I think my arm is trying to write something.»
  • Acosta: 2I don’t know what to believe anymore.»
  • Hamilton: «We only have fuel for three more tests. If it doesn’t work I can’t imagine what could happen.»
  • Schmidt: «Hamilton’s right. It’s gone. We don’t pick up any signals.»
  • Jensen: «Don’t… trust… Schmidt.»

Trailer de «The Cloverfield Paradox»:

Por Imanol De Frutos

Graduado en ESCAC y montador de profesión. Siempre hambriento de ficción.

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