Maggie Smith nos deleita con una impecable interpretación de Miss Shepherd, una vagabunda de lo más peculiar.
Argumento con transfondo
Esta entrañable historia está basada en la vida de Alan Bennet (interpretado por Alex Jennings), y empieza cuando el escritor se muda a su nueva residencia para poder dedicarse a sus obras. Pero lo que no sabe es que durante los próximos 15 años compartirá vida con una sin techo, la señorita Shepherd (Maggie Smith), con la que establecerá una complicada relacion que con el paso del tiempo dará significado a la vida de ambos.
Para entender mejor esta aventura tenemos que profundizar un poco en sus protagonistas. Podríamos describir al señor Bennet como un escritor con una personalidad dividida: su Yo escritor, y en su Yo vividor. Uno escribe y siente la necesidad de convertir las experiencias en novelas, y el otro vive e intenta disfrutar para no convertirlo todo en un beneficio para sus obras. Y podemos definir a Miss Bennet cual mujer anciana, sin hogar, que vive en su furgoneta (Lady in the van), la cual mueve constantemente cada poco tiempo por motivos diferentes. Cuando necesita ir al baño, el señor Bennet se ve obligado a dejarla usar el suyo. Y lo que empezó así, acabó con la vagabunda ocupando un espacio en la entrada de la residencia de Alan, durante 15 años, situación que cada uno aprovechará para avanzar con sus vidas.
La interpretacion personificada
Lo que queda claro es que en Maggie Smith recae todo el peso de la cinta. Si estamos o no ante la mejor interpretación de su carrera se queda en la opinión de cada uno, pero la ganadora de 2 Oscar entre sus 4 nominaciones a los mismos deja el listón muy alto en lo que podíamos considerar el otoño de su vida. Esta mujer puede transmitir muchísimas más emociones con una cara estática que cualquier otro, y en esta película es el claro ejemplo de este hecho.
Y es que interpretar a una mujer borde, arisca, desagradecida, “chocha” al fin y al cabo, anciana y desmejorada no es difícil. Lo complicado es conseguir que el espectador se enamore de esa persona. Y creedme, lo consigue.
Alan Bennett le da un toque agridulce al guion al introducir un poco de crítica social, al poner el acento sobre los prejuicios que tenemos cualquiera en este caso con la gente sin techo. Mucho separa del modelo de vagabundo que podemos encontrar en España con el británico que nos propone el afamado guionista, siendo este una persona culta, sabia, que no utiliza el sentimiento de la pena para que la gente le diera dinero. Por este motivo, tratar con ellos se convierte en todo un desafío.
No solamente las tensas relaciones personales entre Bennet y Shepherd será fuente de inspiración, también lo será la curiosidad. De ahí que Alan considera usar lo que va descubriendo de su compañera en sus futuras obras. Ve en ella un reflejo de su anciana madre, lo que le provoca sentimientos encontrados. Y en el caso opuesto, la anciana Shepherd encuentra en el escritor un confidente, que en el fondo se preocupa por ella y no la desprecia, aunque nunca le agradezca esos gestos. Así, Bennet consigue que pueda abrirse un poco más al mundo al contar más de su historia y los motivos que le han llevado a su situación.
Merece la pena
El filme deja claro que detrás de las grandes producciones Hollywodienses, el cine británico puede presumir de una calidad excepcional con bajo presupuesto pero con una historia que empatiza, conmueve y crea una conexión con el espectador con este relato realista.
Podríamos decir que no es ninguna pérdida de tiempo ir al cine y ver este magnífico largometraje, esta comedia dramática con su característico humor británico. Ni aburre ni cansa. Por eso le damos un aplauso enorme para Nicholas Hytner y a Alan Bennett, que ya trabajaron juntos en “La Locura del rey Jorge”. El trabajo de dirección y guion están muy bien pulido. Son tan perfectos que cualquiera que aprecie el cine acabará considerando “Lady in the Van” como un referente en su categoría.
Frases destacadas de “The Lady in the van″:
- Miss Shepherd: “Soy una mujer muy limpia. Gané un premio de ello cuando era pequeña”.
- Alan: “Cuidar a alguien implica mucha mierda”.
- Vecina: “Cariño, ella es un ser humano»
- Michelle: “En pocas ocasiones se la podia ver feliz, y una era cuando pintaba”.
- Miss Shepherd: «¡Lo que iba a ser usar su baño, se han convertido en 15 años!»