«Tierra Prometida» llega a España tras su reciente paso por la Berlinale’13 donde nuestro compañero Victor Martín Pozuelo la definió acertadamente como un «Erin Brockovich» visto por detrás.
Steve Butler (Matt Damon), es un joven de Iowa, que tras ver como el negocio granjero familiar va la ruina, luchará para que no le pase a otros como él. Por eso decide comenzar a trabajar para Global, una enorme empresa que se dedica a explotar las bolsas de gas natural que hay bajo los campos de cultivo. Así llegan, Steve y su compañera de fatigas Sue (Frances McDorman), a McKinley, un pequeño pueblo duramente golpeado por la crisis financiera de los últimos años. A pesar de lo que le mueve son buenas ideas, el lado negativo de todo reside en el proceso de extracción denominado fracturación, porque lo que hace es verter productos que contaminan los campos y los hacen inservibles. De ello, en teoría, ni Steve ni su compañera Sue son conscientes ¿o si? Y lo que les mueve realmente es la avaricia.
La trastienda de Erin Brockovich es grande
Para responder a esta pregunta debéis ver el nuevo trabajo de Gus Van Sant que en este caso levanta el guión original escrito por John Krasinski y Matt Damon, basado en una historia de Dave Eggers. Como os anticipábamos, es un filme que se mueve en la trastienda del filme de Shodenberg. Es decir, el punto de vista gira y vemos toda la acción a través de los ojos de Steve y Sue, los empleados de esa enorme empresa llamada Global, veremos cómo despliegan toda una serie de estrategias para convencer a los granjeros, y como luchan con los ecologistas de Athena, liderados por Dustin Noble (John Krasinski).
Es obvio que este largometraje en manos de otro director hubiera acabo siendo un telefilm barato de sobremesa, pero su buen hacer, sabiendo donde pone la cámara en cada momento para ofertarnos el punto de vista adecuado al avance de la trama, hace que trascienda el modelo y se convierta en un producto reivindicativo y con ciertas pinceladas de costumbrismo. Describe muy bien ese mundo rural, esas noches en bar, esos días en la tienda, el sentimiento de comunidad que hay en este tipo de pueblos. Inclusive el tipo de música que escuchan, todavía me resuenan los acordes de Bruce Springsteen de Dancing in the Dark y el doble sentido que le aplica Van Sant al tema.
Dancing in the dark- Bruce Sringsteen
¿Es un nuevo Will Hunting?
Aquellos lectores que piensen que esto es un papel escrito a mayor gloria de Matt Damon y John Krasinski, están en lo cierto. Pero, lo sorprendente son los dos giros argumentales, uno más previsible que el otro, que hacen de este guión un buen trabajo. Así como bucear en la idea de que los recursos son finitos y que la naturaleza es un bien que debemos cuidar, pero inclusive porque posee un valor cuantitativo (aunque sea difícil de calcular). Encima, Gus Van Sant ha sabido poner a Matt Damon una gran pared en la que rebotar, esa Sue encarnada por una maravillosa Frances McDormand, que con una sola mirada te expresa una gran variedad de sentimientos, sin albergar la menor necesidad de declamar ningún diálogo, ahí reside su gran valor como actriz. Y nos llenó de satisfacción ver como un actor de la talla de Hal Holbrook, al que veneramos desde hace años, sigue defendiéndose ante las cámaras y le reserva un papel con gran fuerza.
Muchos serán los que vean en esta Tierra prometida una extensión conceptual de El indomable Will Hunting. Porque Krasinski no deja de jugar el rol de Ben Affleck. Es un largometraje escrito entre los dos, que se han reservado un papel ambos actores, uno en las antípodas del otro, como ocurría en el oscarizado trabajo. Y para más señas, se han buscado al mismo director que vuelve a realizar una de sus incursiones en el territorio de la comercialidad, que resuelve con eficacia de medios, tomando como base grande actores que levanten un guión normalito, con final previsible, y con una historia tan vieja como la propia humanidad. Pero, que se deja ver sin el menor problema.
Frases destacadas de Tierra prometida:
Steve Butler: “¿Eres el dueño de este lugar?”.
Frank Yates: “No se pierde un partido hasta que se acaba”.
Frank Yates: “Sólo vine para señalar que este tema es más complicado de lo que parece”.
Sue Thomason: “No vuelvas a decir:’Lo siento Sue’”.
Dustin Noble: “Sé quién eres y cómo derrotaros”
Dustin Noble: “No peleamos por la tierra, peleamos por la gente”.
Steve Butler: “Esto sigue siendo nuestro granero”.
Nota de Tierra prometida: 6
Solo por la música ya merece la pena. La veremos para poder criticarla.