Mar. Mar 19th, 2024

Esta es la increíble y fascinante historia de tres gemelos que fueron separados al nacer y adoptados por diferentes padres.

Sexo, drogas y Rock&Roll

No, no nos referimos al famoso concurso televisivo de la noche de los viernes. El día en que Robert Shafran entra en el Community College y todos le empiezan a llamar Eddy es cuando más de uno debió de pensarlo. ¿Cuál es la probabilidad de que tres gemelos separados al nacer y ser adoptados por diferentes padres vuelvan a coincidir por el azar? Lo desconocemos, pero intuitivamente se podría decir que elevada. Este largometraje cuenta la rocambolesca historia de Robert Shafran, Eddy Galland y David Kellman que nacieron el 12 de julio de 196, en el hospital hebreo de Long Island. Su madre se quedó embarazada en el baile de graduación, y por ese motivo, los entregó en adopción a través de la agencia Louise Wise, la más importante de la Costa Este de los Estados Unidos, y que trabajaba especialmente con la población judía.

Tim Wardle estructura esta conmovedora, surrealista y triste historia en dos bloques claramente diferenciados. La primera parte que versa sobre el increíble hecho de que se encontraran los tres. Ahí es donde bucea en la idea de Warhol sobre la fama: “En el futuro, todos serán famosos mundialmente por 15 minutos”. El cineasta nos muestra como los grandes medios de comunicación los lanzan a la fama. Vemos como tres vidas separadas se convierten en una, esta es la típica historia Disney, un cuento de hadas que parece que va a tener un final feliz. Los gemelos aparecen pasan de un periódico local a ser portada de la revista People, Newsweek y comienza así su periplo televisivo, llegando a ser virales. La fama ayuda a los protagonistas disfrutan a tope de la vida, del sexo, de las drogas y el Rock&Roll. También le sirve este alucinante suceso al autor para mostrarnos como los mass media fagocitan estos relatos inusuales y curiosos, así como a sus protagonistas sin contemplaciones.

El reverso del cuento de hadas

Como todo buen 45 rpm, su cara B solía ser mejor que la A. Eso es lo que le pasa a “Tres idénticos desconocidos”. La segunda parte del relato nos cuenta el lado oscuro de esta historia Disney. Es donde el filme adquiere potencia, cuerpo, sentido, y se convierte en un relato demoledor. Todo comienza con el hecho del contraste entre la alegría de los jóvenes y el enfado de los padres adoptivos. El motivo es obvio, la agencia de adopción nunca informó de que existieran dos hermanos más.

Es un documental al uso, nada innovador, pero lo verdaderamente curioso y cautivador es la historia tan humana que hay detrás, que merece toda nuestra atención, y hace que sea totalmente recomendable. Esa fama y la búsqueda de su madre biológica, sumado a otros sucesos los lleva a conocer que era sujetos de un estudio llevado a cabo por un afamado psiquiatra llamado Peter Neubauer. El objeto, parece ser que, era determinar como influye la educación en el individuo. De ahí que separaran a gemelos y los pusieran en el distintos entornos y ambientes para ver cómo marcaban su personalidad. Parece ser que también buscaba averiguar si la enfermedad mental es hereditaria o depende de factores exógenos.

En esta segunda parte es mucho más filosófica y profunda. Es curioso que un grupo de judíos hagan un experimento que parece salido de la mente de un nazi.  Habla del libre albedrio, del poder del inconsciente en la toma de decisiones. El espectador descubrirá que lo que nos hace únicos y singulares son las diferencias y no las similitudes. Tim Wardle es valiente y va más allá de la simple coincidencia. Bucea en la forma en que nos puede marcar el contexto social donde nos criamos. El entorno y las relaciones con terceros son como un cincel que nos moldea con el paso del tiempo. Todo ello nos hace diferentes y únicos.

Frases destacadas:

  • Robert Shafran: “Y ahí estoy yo. Sus ojos eran mis ojos y mis ojos eran sus ojos.”
  • Alice Shafran: “Tener a los tres en la casa al mismo tiempo era una auténtica locura. Mis emociones se reducían al shock
  • Natasha Josefowitz: “Creo que a la gente le inquieta ver la poca influencia que tiene, la falta de control que tiene. No nos gusta así que nos oponemos.”
  • Robert Shafran: “Mi forma de verlo era así: Me parezco más a Eddy que a David, y más a Eddy que a David, y más a cualquiera de los dos que ellos entre sí ¿eso tiene sentido?

Tráiler oficial de “Tres idénticos desconocidos”

Por Alfredo Manteca

Periodismo UCM. Cinéfilo y cinefago compulsivo. Crecí con Kubrick, Hitchcock y Cronenberg.

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