Jeff Wadlow, director de “Kick-Ass 2: Con un par”, regresa con este filme de terror que tiene el claro y evidente objetivo de abrir una nueva y rentable franquicia. Ahora queda saber si el público lo bendice con sus euros y dólares.
Sin alternativas
Blumhouse Productions, productora fundada por Jason Blum, intenta convertirse o ser una suerte de la legendaria Hammer, la mítica productora británica que trabajaba exclusivamente el género de terror, fantasía y ciencia-ficción. Lo hace a fuerza de mucha tenacidad, haciendo largometrajes baratos, e intentado crear franquicias a la mínima que puede, en función de la rentabilidad en taquilla. Entre las rentables podemos destacar “Insidious”, “Paranormal Activity”, “Sinister” o “La purga”. El 2017 fue su gran año porque “Déjame salir” se coló en varias categorías en la carrera final de los Oscars y finalmente, Jordan Peele se llevó a casa la estatuilla al Mejor guion original. Entre sus fracasos, siempre rentables, tenemos “Eliminado”, “La horca”, “El efecto Lázaro”, “Feliz día de tu muerte”. Como se puede apreciar, la fórmula del éxito de Blum es jugar con productos de serie B, sin sacar nunca los pies del tiesto, y tener claro que quien acude al cine son los adolescentes que pasan sus horas en los grandes centros comerciales.
Ahora nos llega “Verdad o reto”, que la podemos englobar en la subcategoría de terror dirigido a los susceptibles adolescentes de la casa, que están en el instituto o camino de la Universidad, con ganas de explorar la vida, las drogas y el sexo. Markie Cameron y Olivia Barron son dos amigas íntimas universitarias están cursando el último año. Viven juntas en la misma sororidad y su relación es muy estrecha, se conocen desde hace muchos años, aunque hay secretos ocultos en su relación. Como la vida las llevará en breve por distintos derroteros, Markie acaba convenciendo a Olivia para pasar el Spring Break en México, en compañía de su estrecho grupo de amigos: Lucas, Penelope, Brad, Tyson y Ronnie. En la última noche, Olivia conoce a un simpático joven llamado Carter. Este les lleva una iglesia que hay en la playa y acaban jugando al mítico juego infantil de «verdad o reto». La inofensiva partida se acabará convirtiendo en un juego letal porque alguien ha despertado a un demonio que castiga a aquellos que no cuentan la verdad o no aceptan el reto.
No pienses y déjalo fluir
Michael Reisz ha desarrollado esta historia a cuatro manos con la ayuda del realizador Jeff Wadlow, forjado a fuego en este tipo de películas. Ambos luchan con uñas y dientes por fabricar y generar una nueva franquicia para la Blumhouse. Este guion hubiera sido algo enorme y muy grande en manos de un realizador como Wes Craven o John Carpenter. El problema está en el tono que le dan al filme Reisz y Wadlow. “Verdad o reto” carece de la dosis de descaro que precisa este tipo de productos. Se lo toman muy en serio. Sus guionistas se tornan sesudos y reflexivos, cuando lo que tienen que dar al público es carne y sangre. Tendrían que haber hecho suyo el lema de los Chemical Brothers: «Don’t think and let it flow».
No consiguen entrar en el juego de su propia premisa. El reto que les proponía Jason Blum era hacer algo entretenido, que respire verdad y honestidad, desarrollando un largometraje por y para ese público joven que acude al cine a devorar palomitas y salir con la panza llena de su refresco favorito. Sus guionistas acaban perdiéndose en los devaneos con el karma cósmico, eso sí, representando a una sociedad plural, tenemos jóvenes de todas las razas y tendencias sexuales. Todo muy políticamente correcto. El desarrollo argumental toma prestado elementos de ese gran descubrimiento en el género que fue “It follows” y lo mezclan con lo peor de “Destino final”, todo con el claro y preciso objetivo de construir una nueva saga. Aquí no es la muerte quien persigue a los jóvenes, es un demonio llamado Callux. Este viene a poner las cosas en su sitio, a satisfacer el karma de todos los que deciden jugar con él. En resumidas cuentas, carecemos de motivos para recomendar este olvidable filme.
Frases destacadas:
- Tyson: “¿Sabes que Olivia está enamorada de tu novio?”
- Carter: “Necesitaba engañar a alguien con amigos que me siguieran hasta aquí”
- Carter: “No me importa que mueran unos desconocidos si así sobrevivo yo”
- Markie: “Nosotros no jugamos, él juega con nosotros”