Entrevistamos al actor Jake Gyllenhaal por su papel en «Enemy», basada en la obra de José Saramago, «El hombre duplicado».
¿Cual es tu interpretación de la novela a la película?
No he leído la novela. Para mi el no haberla leído es una parte muy importante de la película, porque quería que mi impresión cuando leí el guion al principio no estuviera influenciada por la novela; me dio la sensación de que era una atracción, que era la esencia de algo. Pero todos sabemos que traducir una novela al cine es una cosa muy complicada de hacer, y yo tengo una tendencia, -una tendencia que también tiene el personaje de Adam- ,que es «sobreintelectualizar» las cosas. Es decir, que interpreto una novela yendo hacia afuera en lugar de ir hacia dentro. Entonces pensaba que en ese momento, más que coger inspiración de la novela, tenía que coger cosas que estaban pasando en mi vida, porque si no iba a ser una reinterpretación de la obra de Saramago. Y sí, era consciente de que el guion era muy diferente del libro, recordando la primera reunión que tuve con los productores y con el guionista para discutir la historia, sentí que había una elasticidad en la historia pero que ellos estaban intentando apartarse de la novela al sentirse tan influenciados por ella. Yo en cambio no tenía ese problema, yo quería la libertad absoluta de hacer lo que estaba en el guion. Tuve la sensación y la tengo todavía de que es lo que habría querido Saramago: no hacer una copia de la novela sino interpretarla como nosotros lo hicimos. Todo está basado en una idea, no en la novela.
Tras la muestra de San Sebastían hubo mucha discrepancia dualista entre los asistentes sobre la interpretación de la película, los que habían leído el libro, los que no, o sobre las dos facetas de tu papel. ¿Cual crees que es el motor fundamental para esa duplicidad del personaje? ya que se aprecia mucho el deseo sexual que tienen los hombres.
Sí, desde luego que creo que el motor sea la sexualidad masculina. Hay una cosa curiosa que me ocurrió y es que un periodista me preguntó sobre cual era la pregunta que nadie me había hecho o qué me preguntaría a mi mismo, y en ese momento pensé en que nadie me ha preguntado sobre las mujeres de la película. Y eso para mi es extraño porque son dos actrices increíbles, y lo que ellas representan me parece fascinante. Sí que está centrado en el «camino» sexual masculino, pero también sobre el hecho de que un hombre está tratando de comprometerse en una relación íntima. Y sí, es un camino del hombre, pero lo alucinante es que nadie pregunta por las mujeres, y claro, son una parte grandísima de la película, de hecho, ellas definen a los hombres, que no serían quienes son sin ellas.
¿Has conocido a Pilar (mujer de Saramago) para conocer su opinión de la película o que te transmita lo que él habría opinado? ¿Cómo es que has trabajado con Villenueve dos veces en un periodo de tiempo tan corto?
Anoche conocí a Pilar. Ya me habían dicho que era una mujer muy fuerte y muy segura de sí misma, pero fue muy efusiva y para mi fue un gran honor y me emocionó mucho poder conocerla, sobre todo por saber que ella estaba apoyando la película. Luego decir que Saramago desde la distancia sí que estaba presente en el set de rodaje, era una gran inspiración. Cuando la conocí a ella, me dijo que dio el visto bueno al film, que entendía lo que habíamos hecho, y eso me hizo sentir de maravilla.
En cuanto a la segunda pregunta, en realidad nosotros rodamos primero esta película antes que «Prisioners». Pero este fue un proyecto en el que artísticamente nos lo permitimos todo, no había límites. Dejábamos la cámara rodando durante mucho tiempo. Salíamos por la noche a cenar y a beber y a discutirlo, incluso a veces decidíamos eliminar el material de todo lo que habíamos rodado durante un día. Fue un rodaje de indulgencia artística y culinaria (risas). Es la mejor manera, yo quiero hacer películas honestas y con gente que quiera trabajar así, porque es inusual tratar con un director que pase de un tipo de película a otra con tanta facilidad y que encima funcione.
Por cierto, creo que al estar en la habitación de un hotel deberíamos hacer la entrevista sobre la cama, no entiendo por qué no lo hacemos así (bromea entre risas).
Hablando de «Prisioners», tu papel tuvo muy buenas críticas, incluso tanto que algunos creían que deberían hacerse más trabajos del detective Loki, ¿a ti te gustaría? Además, supongo que conoces la serie True Detective, que ahora se comenta que la segunda temporada podría hacerla Brad Pitt, ¿a ti te gustaría también poder protagonizarla?
En cuanto a la primera pregunta, creo que sería muy divertido. A mi me encanta ese personaje lo que pasa que creo que la razón por la que es tan interesante para los demás es porque no puedes ver más de él, así que creo que si diéramos al personaje más de lo que es estaríamos estropeándolo un poco, porque la mitad de su atractivo es que lo desconocemos.
En relación a True Detective, ¿echar a Brad Pitt? no creo que yo tenga ese poder (risas), no me des esperanzas. Al haber hecho más papeles de policía creo que yo encajaría mejor de bombero.
¿Te gustaría volver a trabajar con Richard Kelly (Donnie Darko)?
Me encantaría, tenemos unas mentes muy parecidas y que me encanta la manera en que mira el mundo. Nuestras mentes funcionan muy bien juntas. De hecho Richard me ha hablado de un proyecto hace poco, así que es una posibilidad muy factible que volvamos a trabajar juntos.
En «Dead Ringers» (Inseparables, 1998), Jeremy Irons interpreta a dos gemelos con distintas personalidades. Tú en este film das vida a dos hombres que físicamente son iguales pero psicológicamente no. Como actor supongo que es todo un reto. ¿Cómo se construye un personaje para conseguir que el espectador no se pierda en ningún instante?
Denis (Villeneuve) quería que fueran dos personajes diferentes sutilmente, y claro, cualquier actor tiene su ego y quieres hacer dos personajes inmensos, pero yo como actor admiro mucho las cosas sutiles. Es el tipo de actuación que a mi me gusta, cuando hay detalles muy pequeños, que es lo que hacen una diferencia muy grande. Por tanto lo que hice fue partir de dos ideas, de un tipo de persona que es Anthony, que entra a una habitación, le dicen que no y él entra de todas formas y consigue lo que quiere; y en cambio Adam entra en una habitación, le dicen que no y se disculpa, se va y no consigue lo que quiere. Partiendo de esas dos cosas, vas construyendo poco a poco con cosas muy sutiles, pero cada decisión que toman los personajes, lo basé en eso, en que eran esos dos tipos de personajes. Es el tipo de persona que ves en la vida bastante de dos extremos, los que consiguen lo que quieren y los que no y se disculpan.
Es uno de los grandes y por como contesta en las entrevistas creo que es humilde, eso le hace mas grande como actor y como ser humano. Los libros de Saramago son intensos (no lo he leido) ire a ver la peli primero y luego leere el libro.
Es una gran opción cinéfila, porque por lo que ha declarado el director se ha inspirado a diferencia de Meiralles que hizo una versión más literal.