Entrevistamos a María Ripoll, la directora de la comedia romántica “Ahora o Nunca”. Este simpático filme ya se ha alzado como el mejor estreno español del año.
María Ripoll es una realizadora catalana con una larga experiencia en el mundo del cine. Entre sus cintas se encuentran “Tu vida en 65 minutos” y “Rastros de Sándalo”, que ganó el premio Gaudí a la mejor película catalana en la última edición de los galardones. Su nueva incursión cinematográfica ha resultado ser una de las comedias románticas más tiernas, amenas y entretenidas del año, “Ahora o nunca”. La cinta está protagonizada por los taquilleros y talentosos Dani Rovira y María Valverde y relata una gran historia de amor entre risas y enredos. Videodromo entrevista a la realizadora en Barcelona con motivo de su estreno.
Buenos días, María. En primer lugar, nos gustaría saber, cómo llegaste al proyecto.
María Ripoll: “El productor Paco Ramos me envió el guión de “Ahora o nunca”. Es una persona con mucho instinto y criterio para crear proyectos nuevos, frescos e interesantes. Con él ya había hecho otras dos películas anteriores: “Utopía” y “Tu vida en 65 minutos”. Un día me dijo si quería hacer una comedia, puesto que ahora era el momento de hacerlas. Fue justo antes del éxito fulgurante de “Ocho apellidos vascos”. También me dijo que mirara el monólogo de un chaval con mucho potencial: Dani Rovira. El chico me gustó y acepté dirigir la película. Luego, Rovira despegó hacia la fama con “Ocho apellidos vascos”, pero siguió comprometido con nuestro proyecto. Y la verdad, ha sido un placer trabajar con él y con todos los actores que aparecen en el filme, que no son pocos.”
Así pues, ¿el proyecto ya te llegó con Dani Rovira como elección segura? ¿El guión fue escrito pensando en él para el personaje de Alex?
M.R: “No, la verdad. El guión de “Ahora o nunca” fue escrito por Francisco Roncal y Jorge Lara, que son los guionistas de “Zipi y Zape y el club de la canica” y también han trabajado para la televisión. No lo escribieron pensando en Dani Rovira. Fue Paco Ramos, un buen productor, quien pensó en él. Yo no lo conocía, pero cuando miré el monólogo que me recomendó Ramos vi que tenía mucho potencial y me arriesgué. Y luego, llegó “Ocho apellidos vascos” y pasó todo lo que pasó.”
¿Hubo un proceso similar con María Valverde?
M.R: “No. Yo ya había intentado trabajar con María en “Tu vida en 65 minutos”, pero no pudo ser por fechas. O sea, ella ya estaba en el proyecto, pero tuvimos que retrasar el rodaje y se vio obligada a abandonarlo para poder gravar otra película. Y, la verdad, fue ella quien se me acercó y me dijo: Nunca he hecho una comedia y tengo muchas ganas. ¿Te atreves conmigo? Y yo le contesté: Si tus ganas son verdaderas, sí. Yo creo que María tiene mucha naturalidad y que el personaje de Eva le va como anillo al dedo. Porqué el personaje tiene mucha fuerza pero a la vez tienes que sentir mucho por él. Creo que Dani tiene un tono interpretativo diferente al de María, siendo el de ella un poco más dramático. Pero aún y así, creo que este equilibrio va muy bien para la historia ya que ayuda a involucrarte también, sentimentalmente, con la trama de las chicas.”
¿Por qué optaste por dar una imagen tan estilizada a la película?
M.R: “Para mí lo visual es muy importante. Como contar una historia en imágenes es lo que me lleva a hacer películas. Personalmente, creo que la comedia española siempre se ha tratado con una luz muy plana y unos planos muy obvios. Y uno de los retos de dirigir esta película era alejarme de esta tendencia y acercarme más a mis referentes, pertenecientes a la comedia británica. Y creo que he logrado mi objetivo gracias a que me he rodeado de buenos profesionales como Pau Esteve Birba, el director de fotografía y también, a que he seguido mi instinto. Des del principio quise darle un tono internacional al filme. Ya que es una especie de “Españoles por el mundo”, quise otorgarle un espíritu internacional, europeo, tanto con la imagen como con la música, que es del compositor Simon Smith. A Simon lo descubrí en “Rastros de Sándalo”. Las piezas que hizo para el filme me gustaron tanto que le propuse hacer una banda sonora completa, cosa que nunca había hecho. Por suerte, se atrevió y estoy muy contenta con el resultado.”
“Des del principio quise darle un tono internacional al filme tanto con la imagen como con la música.”
Has hablado de la comedia británica. ¿Este tono british estaba en el guión cuando te llegó, o tú incluiste algunos elementos para acercarte a él? Y si es así, ¿Cuáles han sido tus referentes a la hora de darle este enfoque a “Ahora o nunca”?
M.R: “El guión pasaba en el Reino Unido y en Ámsterdam, pero aquello más estético y de tono british es algo que yo aporté personalmente y que me gusta introducir en todos mis filmes. Los referentes clarísimos de “Ahora o nunca” son los filmes de Mike Newell y Richard Curtis. Es decir, “Notting Hill”, “Cuatro bodas y un funeral” y “Love Actually”. Aún y así, como la película es alocada, gamberra, trepidante y vital también me fijé en comedias americanas del estilo de “Resacón en las Vegas” y “La boda de mi mejor amiga”, una película buenísima y que pienso que es un buen referente para “Ahora o nunca””.
«Los referentes clarísimos de “Ahora o nunca” son las rom-coms británicas de Mike Newell y Richard Curtis»
Me gustaría preguntarte si tuvisteis algun problema durante el rodaje.
M.R: “Todos los problemas que te puedas imaginar. Podemos decir que la trama de la película pasó en la realidad. Nos llovió e hizo un frio horrible. Irónicamente, esta película, que es la comedia fresca del verano, se rodó en invierno. El mes de noviembre en Camprodón y en diciembre en Ámsterdam. Hemos pasado un frio terrible, sobre todo los actores. En la última secuencia estábamos a menos seis grados. El equipo técnico, íbamos abrigados hasta las cejas, pero los actores debían ir con vestiditos ligeros. Lo podrían haber pasado muy mal. Pero, por suerte, el grupo de actores estaba muy unido y se convirtieron en una gran familia. Era un filme muy coral y había mucha química entre ellos. Así que, durante los descansos, cantaban, bailaban y hacían de todo para que se les pasara el frío.”
«Irónicamente, esta película que es la comedia fresca del verano, se rodó en pleno invierno.»
Siento curiosidad por la escena del queso. ¿De dónde surgió? ¿Fue difícil de realizar?
M.R: ““Ahora o nunca” es una historia verídica. A raíz de una huelga de controladores aéreos, una enamorada pareja tuvo que solventar muchos problemas y superar múltiples obstáculos para poder casarse. La carrera del queso es también algo real. Es una práctica común en el sud de Inglaterra. Al plantear la escena, primero hicimos un research importante y vimos muchos videos para ver cómo era. Y gravarla ha sido complicado. La verdad, “Ahora o nunca” es la película más complicada de gravar que he hecho porque tiene mucha acción y un ritmo trepidante. Pero la escena del queso fue especialmente complicada. Aún y así, salió muy bien porque nos esforzamos para que así fuera. La verdad, nos hemos esforzado mucho para dar un nivel alto de cine.”
“Nos hemos esforzado mucho para dar un nivel alto de cine”.
Tu película anterior fue el drama étnico “Rastros de Sándalo”. ¿Aceptaste realizar “Ahora o nunca” porque tenías ganas de hacer una comedia pura y dura?
M.R: “La verdad es que yo empecé mi carrera cinematográfica haciendo comedia. Concretamente, el filme “Lluvia en los zapatos”, con Penélope Cruz, Douglas Henshall y Lena Headey, que ahora participa en la serie “Juego de Tronos”. El filme pasa en Londres y es una comedia, no tan gamberra como “Ahora o nunca”, pero muy romántica también. Después realicé “Tortilla soup”, otra comedia, coral en este caso, que pasa en Los Ángeles. Así que siempre me había atrevido con el género de la comedia, pero solo lo había hecho con actores anglosajones, porque creía que ellos tenían una naturalidad innata para la comedia que los actores de nuestro país no poseían. Sin embargo, todo esto ha cambiado. Ahora, los intérpretes españoles están muy preparados y desprenden frescura, fluidez y naturalidad en la comedia pura. Dani Rovira, Jordi Sánchez, Yolanda Ramos, Marcel Borràs… todos los actores de la película lo demuestran. Me he sentido muy a gusto trabajando con ellos. Y ellos han aportado muchísimo al filme. Al fin y al cabo, ellos son la película.”
“Actualmente, los actores españoles desprenden frescura, fluidez y naturalidad en la comedia pura”.
Ahora que hablabas de los secundarios. ¿Fuiste a buscar a algún actor en concreto?
M.R: “Pues, por ejemplo, fui a buscar a Marcel Borràs. Es fantástico. I’m in love with Marcel Borràs. Y también, otro descubrimiento mío fue Anna Gras, que es la actriz que hace de Seis, una de las amigas de Eva. La descubrí en un casting para “Rastros de Sándalo”. Se presentó para un papelito de recepcionista, pero cuando la vi, rápidamente supe que la chica tenía potencial. Para el personaje de Seis se podría haber buscado el cliché de la gordita fuerte, pero pensé que Anna tenía algo especial y que nos ofrecería una Seis divertida, a la par que entrañable.”
En el reparto cuentas con muchos actores cómicos como Dani Rovira, Yolanda Ramos y Jordi Sánchez. ¿Aportaron mucha improvisación en sus escenas?
M.R: “Sí, totalmente. A mí me gusta mucho la dirección de actores en la cual dejas libertad al actor. Como siempre estoy en búsqueda de la verdad y deseo conseguir interpretaciones veraces, no quiero imponer al actor que haga las escenas de una determinada manera o que recite el guión tal y como está escrito. Prefiero que los actores se hagan suyas las frases. Y con estos grandes intérpretes que tenía, tiré mucho de la veta. Dani es un gag continuo. Jordi Sánchez es estupendo. Lo he tenido que recortar bastante. Y Yolanda Ramos… ¡ha robado el bus, prácticamente! Todo lo que sale del bus no estaba en el guión. ¡Ha sido ella quién se lo ha agenciado!”
¿Y cómo entró Melody en el proyecto?
M.R: “Pues esto fue una aportación de casting director. He tenido a las famosísimas Eva Leira y Yolanda Serrano, que son las chicas que han descubierto a Dani Rovira y al Niño [Jesús Castro]. Un día me vinieron con vídeos de cuatro chicas que habían seleccionado para el papel de Irene, la hermana de Alex. Sin embargo, ninguna de ellas me llegaba ni me decía nada. Entonces, de repente, me dijeron que tenían una idea loca y me enseñaron un vídeo dónde aparecía Melody. Yo no la reconocí y les dije: “¡Quiero esta!”. Entre risas me dijeron que era la cantante Melody, y lo les contesté que me daba igual, que la quería a ella. Melody no había actuado antes, pero la verdad es que lo hizo muy bien. Tiene un instinto muy bueno para hacer cosas con naturalidad.”
Como bien has dicho, “Ahora o nunca” es una comedia, pero ante todo es una historia de amor. Es la trama romántica lo que vertebra realmente el filme.
M.R: “Me preocupaba mucho que “Ahora o nunca” solo quedase como una película de gags gamberra. Yo creo que con las películas también tenemos que aprender sobre sentimientos. Uno de mis objetivos a la hora de hacer cine, es lograr que mis películas hagan sentir algo a la gente. Y también, que les hagan pensar. Sé que “Ahora o nunca” no te hace pensar en demasía, pero la historia de amor toca muy en lo hondo, ¿no?”
“Uno de mis objetivos a la hora de hacer cine es lograr que mis películas hagan sentir a la gente”.
¿Y a qué te atreverías para tu próxima película?
M.R: “Ahora mismo estoy cansada. He empalmado dos rodajes. De la india pasé a Ámsterdam, y llevo dos años sin parar. Sin embargo, yo me atrevo con cualquier proyecto o historia que tenga amor. El romanticismo es importante, es dónde me siento bien. A parte, también me atrevo con cualquier historia que me haga aprender algo de manera personal. “Ahora o nunca” es una decisión. A veces, tienes que hacer un “Ahora o nunca” en la vida y decir, pues, tiene que ser ya. Hazlo. Tírate a la piscina.”
“Yo me atrevo con cualquier proyecto que tenga amor. El romanticismo es muy importante para mí”.
¿Cómo ves la situación de la comedia española, actualmente?
M.R: “La veo mucho mejor gracias a que “Ocho Apellidos Vascos”, Martínez Lázaro y Dani Rovira han roto una barrera que había contra el cine español del propio público español. A la gente le apetece más ir al cine, y ahora es un momento en el que el público necesita comedias. La situación actual es complicada y el día a día de la población es bastante duro y con las comedias, pasan un buen rato y disfrutan mientras están en la sala. Con “Ahora o nunca” espero que la gente se lo pase bien, vaya al cine y disfrute del filme y yo, como cineasta, quiero hacer industria con la cinta para que esta crezca y para que muchos buenos profesionales se puedan dedicar también al mundo del séptimo arte.”
Así pues, ¿la sombra de “Ocho Apellidos Vascos” es más benefactora que malhechora?
M.R: “Yo creo que sí, porque el público tiene muchas ganas de ver la segunda película de Dani Rovira. Es verdad que el filme que ofrecemos es muy diferente, pero que la gente saldrá muy satisfecha de la sala. Porque en “Ahora o nunca” te das cuenta que Rovira no es solo un actor de comedia de gags. Ves que es un hombre de acción, que sabe transmitir sentimientos y que sabe jugar tanto al drama como al romanticismo. En definitiva, en “Ahora o nunca”, Dani Rovira demuestra a la gente que tiene muchos registros.”
“En “Ahora o nunca” Dani Rovira nos demuestra que tiene muchos registros diferentes.”
Por último me gustaría comentarte que el juego con los tópicos en esta película está muy bien equilibrado.
M.R: “Fue difícil encontrarlo, la verdad. Tirar de cliché y los tópicos en una comedia es la salida fácil. Pero yo siempre quise matizarlo para que no fuera excesivo. Tradicionalmente, la comedia se basa en jugar con los tópicos, pero, yo le otorgué un matiz que ha hecho que el filme tenga otros registros y llegue más al público. Si tú haces que un personaje sea un personaje y no una persona normal, no sientes tanto por él. Y por eso busqué este equilibrio, para que el público pudiera conectar con todos los personajes y todas las tramas. Tanto con la trama de los chicos, como la de las chicas y como la del autobús.”