Mar. Mar 19th, 2024

El D’A 2020, en su variedad temática, aborda en estas dos películas el concepto de familia desde formas y culturas totalmente diferentes

«Dwelling in the Fuchun Montains»

La siempre esperada sección Talents, que reune la valía de directores noveles, ha decidido apostar por una grata sorpresa que se pudo ver el pasado año en el Festival de Cannes. Gu Xiaogang, presentó una cinta de 150 minutos que parece ser tan solo el preludio de un talento con atisbo de querer continuar. «Dwelling in the Fuchun Montains», nos situa en Hangzhou, una ciudad bañada por el inmenso río Fukun, protagonista narrativo y motor del filme, para metaforizar su transición urbanística vista desde el punto de vista del desarrollo familiar. El plan del gobierno, consiste en derruir los cimientos de la ciudad, con tal de lograr una mejor comunicación interurbana de la que parecen estar de acuerdo sus propios habitantes. Así pues, ya sea desde su propia visión o visualizando la prensa, son conscientes de esta transformación con la idea en la cabeza de qué irá a mejor. Del mismo modo, el realizador chino nos presenta la historia de una familia peculiar. Cuatro hermanos varones, tendrán sus discusiones a la hora de decidir que hacer con su madre anciana de 70 años diagnosticada de alzheimer. Excusa para que la película, bordeando con delicadeza la esencia de «Cuentos de Tokio» de Yasujiro Ozu, emprenda una radiografía a su vez extensa y a la vez escueta de las ramificaciones familiares. Desde una perspectiva estacional, el verano da paso al otoño, para llegar al invierno, a la primavera, y de nuevo al verano. Se muestran pequeños retazos, tablones perfilados que, marcando las pautas correctas, consigue adentrarnos en las difentes rencillas familiares. Conocemos las necesidades, virtudes, defectos y deseos de los diferentes miembros y la relación que guardan unos con otros. Todo ello logrado gracias a la acertada dirección de un director que no duda en sumergirse literalmente en el río Fukun para regalarnos una proeza visual y un plano secuencia, que resume a la perfección el nacimiento y la vez la imposibilidad, de una relación amorosa entre dos personas en una primera cita.

Xiaogang nos deja en última instancia una cinta irreprochable, logrando con creces sus objetivos marcados, apelando a la naturalidad y comprometiéndose con la verosimilitud de una ciudad que, al igual que sus gentes, están en continua evolución, sin ser conscientes de lo que acarreará para ellos. Cine naturalista que cree en el ser humano y que levanta una brizna de esperanza ante la desolación temática del cine chino contemporáneo.

«Los sonámbulos»

La sección oficial nos lleva a Argentina para fraguar a fuego lento una intensa tensión familiar en «Los sonámbulos». Cinta realizada por Paula Hernández recluyendo en una finca rural a una serie de personajes enfocados desde el punto de vista femenino, tanto adolescente como maduro. Una reclusión que sirve para abordar la certeza de las continuas desapetencias y rivalidades conyugales o fraternales. Un cóctel explosivo que se desarrolla con templanza y veracidad si bien es capaz de emplear pequeñas licencias poéticas que abrazan lo real maravilloso. Recurso que sirve para marcar el sino hereditario del sonámbulismo como metáfora de la inestabilidad emocional de los personajes retratados.

El filme se vuelca en la siempre complicada adolescencia vista desde los ojos de la joven Maria. A su vez, su siempre atenta madre vive el drama de tener que vigilar contantemente a su hija, víctima del sonambulismo, símbolo de la decadencia de su familia política. En una huída a la casona matriarcal, convivirán tíos, primos, hermanos y cuñados en un ambiente caluroso, donde la piscina, el sudor, los cuerpos semidesnudos y las comidas al aire libre, mutarán en algo más bien tormentoso y opresivo que relajado y veraniego. Lo que en un principio podría ser una idílica y casi lujosa retirada del mundanal ruido de la vida cotidiana, acaba por golpear a sus personajes hasta hacerles despertar. Vivimos con refinada violencia las discusiones económicas, la falta de entendimiento conyugal y fraternal y el descubrimiento de la seducción y la sexualidad en la adolescencia. La endogámica reclusión de los secretos familiares irradiará una capa de toxicidad cuyo único remedio parece ser el tomado por sus dos protagonistas en la resolución final.

Un filme ante todo cuidado en estructura, que invita a la paciencia del espectador para sumergirle en una vorágine de pasiones desatadas que encarnan algunos de los males silenciados que subyacen incluso bajo el seno de las mejores familias.

Podcast Lo que te DA tu madre:

Como ya hicimos en el Festival de San Sebastián en 2018, nos volvemos a reunir con los amigos de Cine y sé Feliz y Celuloides en Remojo, y con la incorporación de La película del día, para comentar en forma de Podcast lo que da de si el D’A. Esta vez, como no puede ser de otra manera, telemáticamente.

Puedes descargar el podcast de 15 minutos clicando aquí. O escucharlo online:

Por Luis Suñer

Graduado en Humanidades, crítico de cine y muerto de hambre en general.

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