En el momento de escribir estas líneas han pasado unas seis horas desde que he salido del pase de la última película de Jean-Luc Godard. Y lo cierto es que aún no sé muy bien qué he visto. Contrapunto a lo sucedido horas antes, cuando hemos asistido a la confirmación de Pawel Pawlikowski como un cineasta virtuoso.
“Le livre d’image”: la imagen fosforescente
Hasta esta tarde a esos de las 16h, pensaba que lo peor que le puede pasar a un acreditado es tener que escribir de una película que no le ha gustado. Personalmente, una siempre tiene la sensación que hay alguna carencia en la mirada con la que ha asistido a ciertas películas. Y es probable que esa carencia exista, pero tras asistir al pase de “Le livre d’image” creo que hay algo peor que el componer un texto medianamente coherente sobre algo que te ha producido algún tipo de rechazo, y es el tratar de estructurar una opinión cuando no tienes muy claro qué es lo que has visto.
Con “Le livre d’image” asistimos a una película estructurada en cinco episodios, siendo cada uno de ellos un caleidoscopio de imágenes, referencia a películas clásicas, opiniones políticas y una selección cuidadísima de piezas musicales clásicas. Imágenes tratadas para añadirles colores brillantes, sombras o, directamente, deformarlas. Godard juega con todo ello para adaptarlo a su discurso y lo hace con un montaje seco, casi violento, en el que fuerza todas las piezas para que se dobleguen a sus designios de creador. Imágenes de “La bella y la bestia” (Jean Cocteau, 1946) seguidas de vídeos propagandísticos de ISIS, la imagen ya existente se mezcla con la actual. Todo ello mezclado con referencias constantes a textos de autores reconocidos, fundidos en negro, estallido de colores, la voz en off en discordancia con la imagen. Todo ello en sucesión durante 85 minutos.
La película aborda temas que no son nuevos en el cine de Godard. Pero en esta ocasión la ética del cine y su status, se mezclan con una mirada al mundo árabe. Un mosaico de ideas que acaba siendo engullido por la propia personalidad del director, que abarca y absorbe a su propia obra. Resulta un poco molesto el tono mesiánico con el que nos alecciona Godard, pero llega en un momento en que el espectador ya está completamente apabullado por los flashes fosforescentes. Al final, la tomadura de pelo y la obra maestra estará en el ojo de quien vea la película.
“Cold war”: el clasicismo de Pawel Pawlikowski convence en La Croisette
A quienes les gustara “Ida”, en la nueva película de Pawel Pawlikowski, “Cold War”, encontrará los ingredientes que ya atrajeron la atención en su obra anterior. La fotografía en blanco y negro, los personajes que se enfrentan a algo que es más grande que ellos mismos (ideas políticas, creencias religiosas), etc. Para quienes “Ida” les pareciera una obra redonda, aunque es cierto que aquí encontrarán los mismos elementos, estos han sido revisados y mejorados.
La propia historia requería la presencia de una actriz con personalidad y con más carisma que Agata Trzebuchowska, quien interpretaba a la novicia Anna en “Ida”. En esta ocasión, Pawlikowski ha contado con Joanna Kulig. Junto con Tomasz Cot, forman una pareja que se quiere, se hiere, pero cuyo amor sobrevive incluso a pesar de ellos mismos. A través de ellos, el realizador capta la tristeza y la crueldad de una época oscura. Lo hace con una fotografía cuidadísima y elegante, y con un uso de la acción fuera de plano muy acertada.
Uno de los aciertos de la película es que sabe en todo momento qué quiere contarnos. A partir de ahí huye de exposiciones pedagógicas del momento del tiempo en que ocurre la opción. Este se nos muestra mediante pequeños detalles algunas escenas, o puede extraerse de algunas conversaciones, pero la ambientación está tan lograda que no necesita de preámbulos explicativos.
La cinta ha sido acogida con verdadero entusiasmo en todos los pases y disfruta de mayor consenso que la obra de Godard. De momento, junto con “Leto”, una de las favoritas de lo visto hasta ahora, que quedaría de la siguiente manera:
- “Cold war”
- “Leto”
- “Plaire, aimer et courir vite”
- “Todos lo saben”
- “Yomeddine”
- “Le livre d’image”