Drew Goddard lleva los preceptos de la Nueva ola francesa al thriller estadounidense en su nuevo y excelente trabajo, que acabará por sorprender al espectador.
El remake de “La piscina” nos llega 47 años después con una versión que cuenta con un excelente reparto y una enorme capacidad de atrapar al espectador.
Una supuesta vuelta de tuerca a las comedias románticas que, en el fondo, es un canto al consumismo y a las relaciones de pareja como fin último en la vida de cualquier mujer occidental de más de 30 y menos de 40.